Domingo 10 de Agosto de 2008 > Internacionales
La votación comenzó a las 8
Los recintos electorales se abrieron en Bolivia a las 8  en medio de un clima de relativa calma para el referendo en el que se decidirá la suerte del presidente Evo Morales, el vicepresidente y los principales líderes regionales, la mayoría opositores del mandatarios. Mientras, Evo Morales acusó a Estados Unidos de financiar violentas manifestaciones cívicas en su contra, como la que se produjo el miércoles en la ciudad de Trinidad (noreste), buscando incluso enfrentamientos, dijo hoy a la prensa local.

La votación se cerrará a las 18.00 hora local (2200 GMT). No se espera que la Corte Nacional Electoral vaya a dar a conocer resultados oficiales, pero las principales cadenas de televisión difundirán conteos rápidos a partir de esa hora.

Más de un centenar de observadores internacionales participarán del plebiscito, entre ellos de la Organización de Estados Americanos (OEA), Mercosur y legisladores europeos, informaron autoridades electorales. El domingo por la madrugada desconocidos robaron papeletas de votación y ánforas en Yucumo pequeña localidad del departamento de Beni al noreste, denunció a la emisora Erbol la delegada electoral Fanny Párraga. Yucumo es una localidad afín al presidente Morales.

La consulta se realiza además en medio de una huelga de hambre de cuatro prefectos (gobernadores), todos ellos opositores que reclaman la devolución de unos fondos del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH) que el gobierno tomó de los presupuestos regionales para pagar un bono a personas de la tercera edad. Los prefectos de Santa Cruz, Beni, Pando y Tarija realizan la protesta en oficinas públicas en las capitales departamentales. Los cuatro encaminan gobiernos autónomos en sus regiones que el gobierno descalificó por ilegales.

El plebiscito busca dirimir la disputa política entre el gobierno de Morales y los prefectos opositores que ha sumido al país en una crisis prolongada. Morales tenía que encabezar una actividad de cierre de campaña en la ciudad amazónica de Trinidad, pero grupos civiles se apostaron en las puertas de ingreso al aeropuerto local y amenazaron con tomarlo para evitar que el gobernante pueda desplazarse por la ciudad. "El miércoles en la noche tenía que estar en Trinidad y esa movilización que se dio fue pagada por la embajada de los Estados Unidos, tenían bien preparado incluso para cobrar vidas", dijo el gobernante, citado por la agencia estatal de noticias ABI.

AFP

Use la opción de su browser para imprimir o haga clic aquí