CHOS MALAL (ACHM).- Como consecuencia de las gravísimas lesiones que recibió, falleció ayer el chico que el viernes fue atropellado y abandonado por el conductor de un vehículo que se dio a la fuga y luego fue detenido.
El niño tenía 12 años e iba a la escuela caminando y acompañado por su mamá. El menor había sido trasladado a la capital neuquina en un vuelo sanitario y a pesar de los denodados esfuerzos por salvarlo murió en la víspera y sus padres decidieron donar los órganos.
En tanto el conductor del Fiat Duna que protagonizó el accidente, Miguel Riquelme, al cierre de esta edición, seguía demorado en la Comisaría 24 y a la espera de la resolución del juez quien definirá su situación procesal, aunque se descuenta que quedará detenido. Riquelme podría ser acusado de homicidio en accidente de tránsito y abandono de persona.
Hondo pesar se vive Chos Malal y especialmente la comunidad educativa del Departamento de Aplicación 2, al conocerse del deceso de Enzo Barahona. El niño concurría al establecimiento primario.
Enzo fue internado en la clínica San Lucas . Ayer sus restos llegaron a esta ciudad donde serán inhumados en las próximas horas.
Cabe recordar que el viernes y cuando se dirigía al colegio con su mamá, Enzo fue arrollado por un conductor que no solo no detuvo su marcha para socorrer al herido sino que además se dio a la fuga, provocándole graves traumatismos.
Datos aportados a la policía por la madre del menor que lo acompañaba en ese momento y un taxista, posibilitaron en pocos minutos dar con el auto y detener al conductor, un joven de 20 años cuando intentaba llegar a su domicilio en al barrio Don Bosco. Tuvieron que atravesarle un vehículo para que se detenga.
El accidente se registró cerca de las ocho de la mañana de viernes, oportunidad que Enzo Barahona 12 años en compañía de su mamá, Andrea Maureira, se dirigían Departamento Aplicación , donde cursaba los estudios primarios. Lo hacían por calle Tucumán cuando el menor fue arrollado por un Fiat Duna color dominio AHH375, conducido por Miguel Riquelme, quien conducía en aparente estado de ebriedad desde el barrio Uriburu hacia el centro de la ciudad.
Otros datos dan cuenta que minutos antes, vecinos de este populoso barrio habían visto el automóvil, fuerte, vidrios bajos y con la música fuerte.