Con seis jugadores del plantel que hace cuatro años asombró al mundo al ganar el oro, el seleccionado argentino de básquetbol iniciará mañana la defensa olímpica ante ante Lituania. Es cierto que hay margen para recuperarse, pero se trata de un duelo clave, que puede marcar el futuro en el certamen.
Emanuel Ginóbili, Luis Scola, Fabricio Oberto, Carlos Delfino, Andrés Nocioni y Leonardo Gutiérrez son los sobrevivientes de Atenas-2004 que llegaron a Pekín al frente de un equipo que viene en alza y ganó la el Diamond Ball.
Sergio Hernández avisó que "recuperamos terreno, pero todavía no jugamos al nivel que podemos".
Del otro lado estará el duro Lituania, que cuenta con jugadores de renombre como el ala-pivot Linas Kleiza, de Denver Nuggets, y Sarunas Jasikevicius, hoy en Panathinaikos, pero con pasado en Indiana y Golden State. Ramunas Siskauskas, de CSKA Moscú, es su tercera pieza determinante.
Claro que el quinteto europeo sufrirá la baja del gigante Zydrunas Ilgauskas (2,21 metros), porque Cleveland no lo autorizó a participar.
"Ellos son los campeones olímpicos y tienen experiencia internacional de sobra", señaló Jasikevicius, como para dejar en claro el respeto que hay por Argentina.
En la misma sintonía, Fabricio Oberto afirmó que "son un país de básquetbol y será difícil enfrentarlos. Tenemos que estar concentrados al máximo".
La historia reciente de los Juegos marca que Lituania es un "grande" de la disciplina, con medalla de bronce en Barcelona 1992, Atlanta 1996 y Sydney 2000, y un cuarto puesto en Atenas 2004,
El antecedente más cercano marca un claro 94-75 para los lituanos, en Orense. Sin embargo, el conjunto albiceleste estaba en plena pretemporada y jugó sus peores 40 minutos de los últimos tiempos.