BUENOS AIRES . - Los mercados financieros registraron ayer una de las peores jornadas de los últimos tiempos, con fuerte depreciación de los bonos locales, una caída del índice bursátil Merval de casi el tres por ciento y el alza del indicador que mide el riesgo país a niveles máximos.
La mayoría de los analistas coincidió en que en el caso de nuestro país se sumaron un
contexto internacional desfavorable (con preocupaciones por una posible recesión en EE.UU. y en Asia, ver pág. 25) profundizado por las malas señales internas.
La defensa de diferentes funcionarios a los índices de precios elaborados por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), ante los reclamos de empresarios habitualmente afines al Gobierno, echó por tierra con las expectativas de algunos inversores acerca de la posibilidad de cambios en el organismo. Esto se reflejó en los bonos indexados en base al índice oficial de inflación, que cayeron más del 5%, mientras crecen los reclamos para que se devuelva credibilidad a los indicadores económicos oficiales (ver aparte).
El Merval cerró la rueda en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires en 1.815,98 puntos, lo que representó un derrumbe del 2,97% respecto a la víspera, influido por la desfavorable jornada internacional y la creciente desconfianza de los inversores en la Argentina. El índice llegó a perder hasta un 3,49% pero en los últimos momentos recuperó terreno. De este modo, acumula un retroceso de 13,8% en ese mes y 15,6% en este 2008.
Los principales bonos argentinos finalizaron con una merma promedio del 2,7% ante ventas en cascada en todos los segmentos del mercado, comentaron los operadores. "El llamativo nivel de ventas en la línea de bonos fue causado muy probablemente por la tasa que debió pagar Argentina para financiarse con Venezuela", dijo Diego Zavaleta operador de la firma bursátil Besfamille.
El gobierno venezolano compró u$s1.000 millones en Boden a precios de mercado, con un rendimiento del 16% anual .
El índice que mide el riesgo país trepó por su parte a casi los 700 puntos básicos. Operadores comentaron que una persistente venta de títulos domésticos por señales de desaceleración de la economía y dudas sobre la capacidad de financiamiento del país, más una mejora en el valor de los bonos norteamericanos, empujaban el alza del riesgo. La barrera psicológica de los 600 puntos del riesgo país fue superada a fines de abril pasado cuando Standard & Poor's puso en revisión negativa la calificación de la deuda argentina.
La cotización del dólar se mantuvo en 3,02 pesos para la compra y 3,06 pesos para la venta.
(DyN/Redacción)
