La australiana Meera Thangarajah, de 34 años, sorprendió al mundo, el 29 de mayo último, al dar a luz una niña que se desarrolló, contra todo pronóstico, en el ovario y no en el útero.
La información difundida ayer a través del portal de noticias "123.cl" de Chile y el diario "Clarín" añade otra sorpresa. Que la circunstancia de tan insólito embarazo se descubrió bastante tardíamente, ya que los controles realizados durante varios meses, no habían alertado de la situación.
Fue en el momento en el que se le practicó la cesárea -dice "123.cl" cuando se descubrió este asombroso caso. Ni siquiera en los controles prenatales y ecografías lo habían detectado. Durga, tal el nombre de la niña, pesó 2.8 kilos al nacer y ha hecho historia.
El obstetra Andrew Miller señaló que estaba atónito cuando descubrió que el bebé estaba en el ovario derecho. "Esta forma de embarazo es muy rara, jamás escuché que lograse llegar a término, ni aquí ni en ningún otro hospital", señaló Miller. "Es un milagro que haya tenido un bebé vivo. Ella tiene mucha suerte".
Los padres de la niña, Ravi and Meera Thangarajah, proceden de Sri Lanka y emigraron a Australia hace 20 años.
Las autoridades del Darwin Private Hospital explicaron que el embarazo en el ovario "no se presentó en una exploración realizada en la mitad del embarazo, y la madre no demostró sintomatología inusual, por lo que no tomaron ninguna decisión al respecto".
Un embarazo ectópico ocurre cuando el bebé comienza a desarrollarse por fuera del útero. Su incidencia es de aproximadamente 3,5 a 5% de todos los embarazos y existen distintos tipos de acuerdo al lugar de implantación del embrión.
Su diagnóstico puede ser precoz por medio de una ecografía durante la búsqueda de un embarazo normal ante una falta menstrual temprana, o bien ante distintos síntomas (hemorragias, fuertes dolores, etc). Si no se trata, puede causar sangrado interno y ser muy peligroso para la madre. Por lo general, deben terminarse quirúrgicamente.
Durga (diosa hindú protectora de la maternidad) Thangarajah nació tras una cesárea compleja que duró dos horas a las 38 semanas de gestación; y es la segunda hija del matrimonio Thangarajah.
El Royal College of Obstetricians and Gynaecologists dijo que la posibilidad de supervivencia en tal embarazo era de "una en un millón". El ovario corría el riesgo de estallar y causar una hemorragia.
El doctor Miller explicó a la prensa que la madre tuvo mucha suerte porque el ovario no estalló mientras el bebé crecía y lo fue estirando; tanto que se podía ver "el cabello del bebé a través de él. Si se hubiera "roto", la vida del bebé y la madre habrían corrido grave peligro. Esta forma de embarazo es bastante rara, que haya llegado a término es inaudito. Es verdaderamente un milagro", concluyó