SAN MARTÍN DE LOS ANDES (ASM).- La comunidad Curruhuinca y el gobierno neuquino alcanzaron anoche una tregua de 90 días y los mapuches "suspendieron" la medida de fuerza que paralizaba la actividad turística en el cerro Chapelco.
El acuerdo trajo alivio a las autoridades provinciales y sobre todo al municipio de San Martín de los Andes.
"Por el término de 90 días la comunidad Curruhuinca se aviene a presentar un recurso administrativo legal y el gobierno suspende los plazos procesales de esa medida, para permitir a la comunidad, en el término de esos 90 días, reunir la documentación pertinente que avale su demanda sobre el lote 69A", dicen los párrafos salientes del documento que se conoció poco después de las 22.
Más allá de esta tregua, las partes se reencontrarán hoy para discutir sobre cuestiones relacionadas con el impacto ambiental.
Ayer hubo marchas y contramarchas, buscando una salida al reclamo de esa agrupación por las tierras que ocupan el corazón del centro de esquí. La solución llegó bien tarde con la forma de un recurso administrativo, que permita a la familia Curruhuinca completar la documentación histórica para sostener sus demandas de propiedad.
Ayer, en más de una oportunidad, se temió que las medidas de fuerza pudieran profundizarse, con nuevos cortes de ruta en la jornada de hoy. Para el gobierno sigue firme el acuerdo de la pasada semana con la comunidad Vera por el lote 69 A, que al cabo disparó la protesta de los Curruhuinca y los cortes de ruta.
Los Curruhuinca quieren la copropiedad de ese estratégico terreno, y no aceptan limitar su reivindicación a la franja lindante, que les reconoce el gobierno. La agitación no termina allí. Sectores desplazados en los procesos de renovación de autoridades de las respectivas comunidades difundieron documentos críticos, que a la vez revelan la división que existe entre los mapuches de los parajes lindantes con Chapelco (ver recuadro).
Luego de las ocho horas de interrupción de las rutas a la montaña el pasado lunes, circunstancia que forzó el arribo del ministro de Gobierno, Jorge Tobares, los Curruhuinca volvieron ayer a cortar el tránsito por la 19 de ascenso al centro de esquí, pero con la modalidad de "permiquete" (ver aparte), dejando pasar tandas de vehículos
cada 10 o 15 minutos, hasta las 11. A partir de entonces se inició la reunión con el ministro, la intendenta Luz Sapag y colaboradores, en el hotel del ISSN. Se abrió la ruta, aunque los mapuches permanecían apostados a un lado del camino y a la espera de novedades.
Precisamente, cuando caía la tarde de otra jornada gris, lluviosa y fría sobre San Martín de los Andes, los Curruhuinca, encabezados por el lonco Ariel Epulef, se retiraron hacia los sitios de corte, para debatir en asamblea los alcances de las alternativas abiertas en la mesa de negociación. Después llegó el arreglo.
El ministro Tobares ofreció a los Curruhuinca un menú de opciones, pero siempre respetando el acuerdo previo con los Vera por el lote 69 A: canon inicial de 70.000 dólares y anual de 50.000 dólares por 30 años, en resarcimiento por el uso de las tierras mapuches en la concesión.
Los Curruhuinca, que desconocen el convenio con los Vera y exigen su revisión, recibieron también la pasada semana una propuesta similar, pero limitándose a 134 hectáreas del lote 69 A, lindantes con el espacio de sus pares y vecinos.
El gobierno basó ambos ofrecimientos en los documentos históricos aportados por unos y otros, pero los Curruhuinca afirman que no se han tenido en cuenta todos los antecedentes. Exigen la copropiedad de un único territorio indivisible. En ese tire y afloje se empantanaron las negociaciones.