BUENOS AIRES (Télam).- Dos mellizos de 14 años y dos amigos de 13 murieron ayer cuando regresaban de una fiesta de cumpleaños y fueron atropellados por un automóvil que dio varios tumbos tras chocar con otro vehículo, en el partido bonaerense de Pilar, informaron fuentes policiales. El conductor del auto que arrolló a las víctimas quedó aprehendido y alojado con custodia policial en una clínica ya que también sufrió lesiones durante el accidente.
El hecho ocurrió ayer a la madrugada cerca de las 4, en el kilómetro 28 de la Ruta 26, a la altura de la localidad de Lagormasino de Pilar, en el límite con la vecina Maquinista Savio, partido de Escobar, en la zona norte del conurbano. Según las fuentes policiales, todo comenzó cuando un grupo de cinco amigos adolescentes regresaban a sus casas del barrio "Ovejero" de Escobar tras participar de una fiesta de cumpleaños de un familiar de uno de ellos.
En el trayecto, mientras los chicos caminaban por la banquina de la Ruta 26, un Chevrolet Astra color negro transitaba por ese camino, desde Del Viso y hacia Escobar, y al llegar a la esquina con la calle Honduras chocó con un Ford Taunus rojo que iba a tomar esa misma vía.
Las fuentes policiales informaron que, al parecer, el Taunus colisionó al Astra en la parte trasera, lo que provocó que el conductor del segundo vehículo perdiera el control del mismo. A raíz de ello, el Astra comenzó a dar varios tumbos, se salió de la ruta y atropelló a cinco de los seis adolescentes que se encontraban en al esquina.
Como consecuencia del impacto, cuatro de los chicos murieron en el acto mientras que el conductor del automóvil que los embistió resultó herido. "Sintieron el ruido del choque y cuando se dieron vuelta ya tenían el auto encima", relató el padre del quinto chico que acompañaba a las víctimas, y dijo que su hijo se "salvó de milagro porque se agachó a levantar una moneda y el auto lo despidió y no lo arrastró" como a sus amigos.
La policía identificó a los fallecidos como los hermanos mellizos Emir y Facundo Paredes (14), Antonio Torres (13) y Silvio Ojeda (13), cuyos cuerpos fueron remitidos a la Morgue Judicial de San Fernando donde se le realizarán en las próximas horas la operación de autopsia.
Juan Paredes, padre de los mellizos muertos, dijo ayer a la prensa que "los autos (que participaron del choque) andaban a toda velocidad por la ruta sin medir que había gente caminando".
"No se cómo vamos a seguir a acá en adelante", expresó el hombre con lágrimas en los ojos, y exigió que los dos conductores queden detenidos hasta que se determinen las causas del accidente.