VILLA REGINA (AVR).- A seis meses del crimen de Nadia Hidalgo, ocurrido el 2 de febrero, sus familiares mantienen en alto el reclamo de justicia, mientras aún siguen sin encontrar cuáles fueron los motivos por los que la chica de 17 años fue asesinada.
A seis meses de la muerte de la chica que residía en el barrio San Martín de esta ciudad, ayer fue terminado el mural que fue pintado en una de las paredes de la biblioteca de esa barriada, donde se dibujó el rostro de la joven junto a una leyenda exigiendo justicia.
"Todavía no le encontramos cuál fue el motivo que llevó a Iván Garrido y Natalí Carrillo (los imputados como presuntos autores del hecho) a cometer este crimen. Sólo encontramos que puede haberse tratado de una venganza, porque a mi hija no le robaron nada, estaba su celular, su anillo de oro, en el departamento había otras cosas de valor, pero lo único que hicieron fue quitarme a mi hija para siempre", comentó Lorena Figueroa, madre de la joven.
Por el crimen se encuentra detenido Iván Garrido, mientras que Natalí Carrillo, quien se encuentra imputada por el cargo de encubrimiento del homicidio, está en libertad hasta el juicio.
"A Iván Garrido lo conocemos, e incluso teníamos trato con él. Mi hija hace un par de años, cuando se comenzó a dictar un curso de guitarra en el barrio para los chicos con problemas, ingresó para ayudar a Iván, y tanto ella como nosotros siempre lo aconsejábamos para que no se metiera en problemas", apuntó Lorena Figueroa.
Una situación contraria vivían con Natalí Carrillo que "en todo momento la insultaba tanto a Nadia como al resto de la familia, es una chica que siempre causó problemas, y pese a que en varias oportunidades se le planteó esta situación a los padres, no tuvo ningún tipo de contención".
