El jefe y subjefe de la delegación Bahía Blanca de la Policía Federal Argentina (PFA), comisario Gustavo Ariel Scelsi y subcomisario Marcelo Alejandro Voros, respectivamente, fueron detenidos en la madrugada de ayer por efectivos de la policía Aeroportuaria, en el marco de la investigación por la fuga del represor militar, Julián Oscar Corres.

Así lo confirmó ayer el titular de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH) de Bahía Blanca, Eduardo Hidalgo.

La fuga del militar que está acusado de delitos de lesa humanidad, es investigada por personal de la Policía Aeroportuaria, por orden de la fiscalía Federal de Bahía Blanca.

Pese al hermetismo del caso, trascendió que la detención del comisario Scelsi y del subcomisario Voros, fue ordenada por el juez Federal, Eduardo Tentoni, quien subroga a su par, Alcindo Alvarez Canale, actualmente de licencia.

Por su parte, la ministra de Defensa, Nilda Garré, ordenó ayer al jefe del Ejército, general Roberto Bendini, y al del V Cuerpo, general Oscar Gómez, una "exhaustiva investigación" sobre la presunta participación de miembros de la fuerza en la fuga de Corres.

Garré dirigió una nota a Bendini en la que le formuló el requerimiento, dijo la fuente, y agregó que el Ministerio de Defensa colaborará con la autoridad judicial que investiga la fuga de "El laucha" Corres en todo lo que ésta estime pertinente.

La ministra también se comunicó por nota y telefónicamente con el general Gómez para ordenarle una "exhaustiva investigación" sobre la presunta participación de miembros del V Cuerpo de Ejército en la fuga, concretada el pasado sábado, del ex teniente de Inteligencia procesado por secuestros, torturas y asesinatos en el centro clandestino conocido como La Escuelita.

La causa

Corres estaba detenido en el marco de la causa 05/07, caratulada "Investigación de Delito de Lesa Humanidad cometido bajo control operacional del Comando del V Cuerpo del Ejército".

Once policías de la delegación Bahía Blanca de la Policía Federal fueron separados y dos de ellos quedaron detenidos -más tarde uno de ellos fue liberado- a raíz de la fuga del ex oficial, aún prófugo, con orden de captura nacional e internacional, y el Gobierno nacional ofreció una recompensa de 150 mil pesos a quien brinde información que permita ubicarlo y devolverlo a prisión.

El fiscal federal bahiense Hugo Cañón aseguró que los allanamientos a la delegación policial de Bahía Blanca y a los domicilios de los policías detenidos aportaron "valiosas pruebas" para "desentrañar la maraña de redes y conexiones" en la fuga de Corres y señaló la hipótesis de una responsabilidad de organismos estatales. (Télam)