La sensación es que las gestiones de Fluminense por Jesús Dátolo no tendrán éxito. Es que el zurdo volante no muestra demasiados deseos de dejar Boca, con el que está a punto de renovar su contrato.
Los representantes cariocas, Gerson Oldenburg y Thiago Ferro, se reunieron con el presidente boquense, Pedro Pompilio, y ofertaron 4,5 millones de dólares con la factibilidad de estirarse hasta cinco, mientras que el club argentino pretendía seis y hasta allí se llegó, por el momento. Finalmente, en las últimas horas se conoció el interés de Barcelona de Guayaquil por llevarse a Leandro Gracián y también hay un ofrecimiento del exterior por el arquero Pablo Migliore, sin que se revelara qué club lo presentó.
Ninguno de los dos futbolistas participó ayer de la práctica de fútbol cumplida por el plantel de Boca, lo que puede interpretarse como un síntoma de que podrían dejar el club a la brevedad.
Por otra parte, Boca aguarda una respuesta del Hamburgo, por la transferencia del lateral izquierdo Luciano Fabián Monzón, que pasaría al club alemán a cambio de diez millones de dólares por el sesenta por ciento del pase.
En las últimas horas, luego de una reunión que mantuvieron el presidente del Hamburgo, Bernd Hoffmann y el entrenador del equipo Martín Jol, se habría decidido concretar la adquisición de Monzón. Por la decisión de vender al lateral izquierdo es que el xeneize rechazó una oferta que llegó desde España por el lateral izquierdo paraguayo Claudio Morel Rodríguez.
Otro que permanecería en Boca, aún sabiendo que el DT Ischia no lo tiene muy en cuenta es Juan Krupoviesa. Luego de las vacaciones, el zurdo descartó ofertas de Rosario Central y de Tigre, pero vería con buenos ojos si surgiera algún ofrecimiento del exterior. "Habría que ver la manera, si me conviene a mí y si le conviene al club", declaró el tucumano.
Por último, Pablo Mouche podría ser cedido a Vélez, que volvió a solicitar el préstamo del jugador.