Miércoles 30 de Julio de 2008 Edicion impresa pag. 11 > Regionales
Batalla judicial por el motel provincial de Río Colorado

RÍO COLORADO (ARC).- Una situación conflictiva entre la Municipalidad de Río Colorado y el concesionario del motel provincial se agravó de tal manera que llegó a manos de la Justicia.

El municipio reclama el desalojo por contrato vencido y atraso en el pago de alquiler y tasas, pero el concesionario se niega alegando que las cosas no están claras, que no debe lo que le reclaman y que esperará la resolución judicial.

Mientras tanto, no se hizo la licitación que correspondía y el motel sigue funcionando como lo hizo durante los últimos años.

El subsecretario de Asuntos Legales del municipio, Ricardo Thompson explicó que "había un contrato que se venció hace dos años y se aplicó una prórroga, porque en realidad como concesión no era tal, no hubo una licitación sino que otra administración municipal hizo un contrato directo con esta persona".

Agregó que "los plazos se vencieron, ya no había más prórroga y entonces el año pasado se le pidió que abandone el inmueble para llevar adelante un nuevo procedimiento licitatorio".

"Esta persona dice al principio que va a dejar el inmueble el 2 de abril del 2008, cosa que nos comunicó por nota. Sorpresivamente, en fecha cercana recibimos una carta documento diciendo que no iba a abandonar el inmueble", continuó Thompson.

El letrado mencionó que a los fines de iniciar las acciones judiciales correspondientes buscaron todos los antecedentes "y descubrimos que llevaba más de un año sin pagar el alquiler y también tenía una deuda importante de tasa comercial. Entonces se inicia un desalojo en el juzgado de Choel Choel que se está tramitando y por el otro lado tratar de cobrar la deuda que tiene con el municipio, que es de unos 50.000 pesos".

Por su parte, el concesionario Diego Di Giussepe dijo a "Río Negro" que el conflicto se inicia "a partir de que la municipalidad decide que para sacar a licitación el hotel nosotros teníamos que desocuparlo".

"En virtud de que el 99 por ciento del equipamiento del hotel es nuestro, y nos generaba un perjuicio grande primero desarmar, después parar el funcionamiento del hotel, el planteo nuestro fue que se hiciera el acto licitatorio y si nosotros perdíamos, entonces ahí sí, juntar nuestras cosas e irnos definitivamente. No desarmar todo, y volver a armar si eventualmente ganábamos".

Más adelante agregó "como las cosas no venían claras, quisimos tener diálogo pero no lo tuvimos. También en el medio nos enteramos que había que ver la legalidad de los convenios entre la provincia y el municipio, porque tenemos entendido que pueden estar caído desde el 2003. Como no estaba todo claro, no había diálogo, sólo aprietes mediante notificaciones, actas o intimaciones, es que decidimos mandar una carta documento para que no nos molestaran hasta que se clarificara la situación".

"Ahora estamos esperando que se expida la Justicia. Si determina que debemos irnos, cuando llegue la notificación nos iremos. Si nos permite la defensa para presentar nuestra documentación, estamos listos para hacerlo", dijo Di Giussepe.

El concesionario también negó deber todo lo que reclama la comuna y por último dejó en claro que "no es voluntad nuestra apropiarnos ni estar 'de prepo' en el hotel".

Use la opción de su browser para imprimir o haga clic aquí