BUENOS AIRES (Télam).- Una pareja que estaba desaparecida desde hacía seis días, fue encontrada ayer asesinada en un baldío al costado de la autopista Panamericana, a la altura de la localidad de Alto Los Cardales, partido bonaerense de Campana, informaron fuentes policiales y judiciales.
Los investigadores estimaron a simple vista que las víctimas fueron golpeadas aunque aguardaban los resultados de la autopsia para determinar si presentaba más heridas.
Fuentes policiales y judiciales informaron que los cuerpos fueron encontrados ayer a la mañana en un sector de pastizales a la altura del kilómetro 60 del Ramal Campana de la Panamericana, del lado de la mano que se dirige a Capital Federal. "No se veían prácticamente desde lejos. Estaban a unos 30 metros de la autopista y hay muchos pastizales crecidos. A un empleado de la autopista le llamó la atención ver un bulto tan grande, entonces se acercó y halló los cuerpos", explicó el fiscal Marcelo Pernici.
El fiscal dijo que "el empleado vio a un grupo de perros olfateando los cuerpos y alcanzó a divisar los pies de uno de ellos", por lo que alertó de lo ocurrido a la policía.
Cuando los efectivos policiales arribaron al lugar junto a los peritos de la Policía Científica y el fiscal, se constató que se trataba de los cadáveres de un hombre y una mujer. El fiscal señaló que "los cuerpos estaban tapados con varias bolsas y basura del lugar". Según Pernici, "el hombre estaba maniatado y aparentemente fue asesinado a golpes" y que "la mujer estaba semidesnuda y podría haber sido asesinada a puñaladas".
En un primer momento, las víctimas aún no pudieron ser identificadas, ya que no llevaban consigo ninguna documentación, por lo que los pesquisas comenzaron a chequear denuncias por desapariciones de personas radicadas durante los últimos días en distintos puntos del conurbano.
Una fuente policial dijo a Télam que durante la tarde se identificó a las víctimas como Carlos Mansilla (41), empleado de la empresa petrolera Petrobras y que trabajaba en Pilar, y su pareja Sandra Rabago (37).
Ambos residían en el Barrio Frino de José C. Paz y habían sido denunciados como desaparecidos el 23 de julio. Ante esa denuncia por "averiguación de paradero" comenzaron a investigar el caso los detectives de la departamental de Investigaciones de José C. Paz.