25 DE MAYO (ACA).- La medida de fuerza que desde el lunes mantienen las familias Fernández y Morales en la zona de Medanitos se agravó anoche. Al cierre de esta edición, corrió el rumor de que se esperaba una orden de la gerencia para parar totalmente la producción y dejar las llaves en la sede policial de 25 de Mayo.
En tanto en el campo, los puesteros impedían el acceso del personal que atiende los 733 pozos, lo que abre la posibilidad de derrames de magnitudes imposibles de predecir. Según los puesteros, la empresa no ha dado señales de querer negociar y los puesteros aseguran que no se moverán hasta que haya una respuesta concreta. A todo esto, el gobierno pampeano no da señales, otorgando los títulos de propiedad que serán la solución total no sólo para estas dos familias, sino para muchas más que han pedido expresamente una solución al tema sin lograr respuesta. Los empresarios venticinqueños experimentan fuertes pérdidas por cada día de corte según comentaron a este diario.
"Hoy (por ayer) vino acá adonde estamos apostados, el señor Vila, de Petrobras. Nos preguntó si habíamos dado cuenta de la pérdida de animales, y nos ofreció solucionar ese aspecto, pero sobre el tema servidumbres, que es el tema central no trajo ninguna propuesta, por lo cual hemos decidido que no pasa nadie más. Hasta ayer (por el lunes) venían serenos que hacían seguridad, pero no pasa más nadie, esa tarea está cubierta por personal policial", dijo a este medio Jorge Morales.
Ayer el problema comenzaba a generar cierta tensión en distintos ámbitos. Por un lado corrió un fuerte rumor proveniente de trabajadores de la empresa P.C.R. que indicaban que se habría decidido parar totalmente la producción y dejar las llaves en al comisaría local como una señal de intransigencia frente al reclamo campesino. Las pequeñas empresas veinticinqueñas fueron las más afectadas, pues tienen costos fijos que deben afrontar sin trabajar. "Yo pierdo cinco mil pesos por día con este corte, y entiendo la postura y los argumentos de la gente que reclama, pero el hilo se corta por lo más delgado. Nosotros no tenemos resto para aguantar mucho más, nuestras empresas subsisten con el trabajo", comentó el responsable de una PYME que pidió reserva de su identidad.
Según los propios trabajadores del petróleo con experiencia en el tema, lo más probable -si el problema no se resuelve rápido- es que se produzcan derrames de los cuales es imposible predecir su magnitud, dado que casi la totalidad de los 730 pozos están sin atención. Fuentes de la actividad petrolera consultadas sobre el particular explicaron que todo el sistema está automatizado y se maneja por un sistema denominado "telemetría" desde la base ubicada en Medanitos del lado rionegrino. Por caso, a través de este sistema se controla cuando una batería tiene el nivel considerado como tope para poner en marcha las bombas. También los pozos están provistos de un dispositivo que detiene la producción.