Domingo 27 de Julio de 2008 Edicion impresa pag. 33 > Policiales y Judiciales
Investigan la muerte de un joven en Cipolletti
Está casi descartado que se haya suicidado. Habría sido un problema entre dos familias.

CIPOLLETTI (AC).- La muerte de un joven de 21 años que falleció a raíz de un disparo con arma de fuego en circunstancias poco claras, es investigada por la Justicia y la Policía de esta ciudad. El hecho ocurrió ayer a la mañana en el barrio Don Bosco y estarían involucradas otras dos personas que se encontraban con la víctima al momento de quedar herido de muerte.

Si bien en principio la policía habló de un posible suicidio, desde fuentes judiciales trascendió que se trataría de un homicidio que involucra a dos familias antagónicas. Aunque Nicolás Gatica (21) fue trasladado al hospital, la gravedad del disparo en la cabeza no permitió que su vida pudiera ser salvada.

Cuando los efectivos, alertados por el Comando Radioeléctrico, llegaron al lugar del

hecho, se encontraron con el joven herido y su hermano en un estado de mucho nerviosismo. Mientras se iniciaban las primeras averiguaciones, la víctima fue llevada al hospital por un patrullero ya que la ambulancia no había llegado y su estado era desesperante, según informó el comisario Raúl Fuentes de la unidad 24, que tiene jurisdicción en la zona.

Según se pudo establecer, ayer alrededor de las 8.30, Gatica se encontraba en su casa de la calle Dante Alighieri, con otras dos personas

cuando, a raíz de una discusión, se habría producido el disparo.

Sin embargo cuando la policía llegó, en el lugar sólo estaba el hermano de la víctima "muy alterado y sin poder ofrecer demasiados datos", aseguró Fuentes.

El jefe policial informó que no se encontró el arma con la que se efectuó el tiro.

Los investigadores suponen que se la podrían haber llevado las dos personas que estaban con Gatica antes de que llegara la policía.

 

¿Ajuste de cuentas?

 

Al ser consultado, el comisario adelantó que "en principio el disparo se lo habría efectuado la misma víctima", aunque poco tiempo después trascendió que se podría tratar de un homicidio desencadenado por un posible "ajustes de cuentas" entre dos familias enfrentadas desde hace mucho tiempo. Varios miembros de ambos grupos tenían antecedentes judiciales.

Ante la gran cantidad de interrogantes que generó el hecho, el cuerpo de la víctima fue trasladado a la morgue judicial de Roca donde se le efectuaría la autopsia para determinar fehacientemente lo que ocurrió.

En tanto, la policía estaba intentando dar con las dos personas que estaban en el domicilio del joven cuando ocurrió el disparo. Las dificultades para establecer lo sucedido se debieron, según Fuentes, por la reticencia de ambas familias para ofrecer mayores datos que permitieran esclarecer el hecho.

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