BUENOS AIRES (DyN).- Cinco personas murieron y otra resultó gravemente herida ayer, luego que un tren eléctrico de la Línea General Roca embistiese a un automóvil, en la ciudad bonaerense de Lomas de Zamora.
Los ocupantes del automóvil, un Fiat 128, eran cinco, de los cuales fallecieron cuatro a causa de la colisión, en tanto que la quinta víctima fue una mujer arrollada por otra formación mientras miraba lo ocurrido, informó a DyN Eduardo Montenegro, vocero de la Línea General Roca.
El hecho sucedió cuando un tren que cumplía el recorrido Ezeiza-Constitución arrolló al automóvil en el que viajaban cinco personas, que habría embestido la barrera baja a raíz de una falla en el sistema de frenos.
La colisión se produjo en el cruce de la calle Loria y las vías de la Línea General Roca, en el centro de Lomas de Zamora y a cincuenta metros de la Estación.
A raíz del accidente, el servicio de trenes eléctricos estuvo interrumpido cerca de seis horas y fue restablecido poco antes del mediodía, informó el vocero de esa línea.
En un primer momento se había informado que los muertos eran cuatro, tres ocupantes del automóvil y la mujer, pero luego se descubrió que entre los hierros del
Fiat había una cuarta persona fallecida, informaron la Policía y el portavoz de la Línea General Roca.
Daniel Vicente, jefe de Bomberos de Lomas de Zamora, explicó que la joven mujer fallecida "estaba cruzando el paso a nivel y fue arrollada por otra formación que venía en sentido contrario" cuando se detuvo a observar el accidente.
El conductor del automóvil, de unos 20 años, fue llevado al hospital Gandulfo, ubicado a pocas cuadras del accidente, donde fue intervenido, aunque las autoridades de ese centro asistencial no habían informado sobre el estado de salud del joven.
"El herido fue trasladado consciente al hospital aunque no sabemos cómo está. Todas las características del accidente nos dicen que el automóvil cruzó con las barreras bajas", señaló ayer a la tarde el jefe de Bomberos, en declaraciones al canal Todo Noticias.
Un señalero que estaba en el lugar donde se produjo el accidente señaló que al socorrer al herido le dijo: "Me quedé sin frenos", y destacó que el joven tendría unos veinte años.
A raíz de la colisión, el automóvil, un Fiat 128 patente CYE 636, se prendió fuego y las llamas se propagaron hacia el primer vagón del tren, aunque el incendio rápidamente fue extinguido por los bomberos. El auto quedó destruido y las únicas partes del vehículo que se salvaron del choque y del posterior incendio fueron las ruedas.
