En el polvo de ladrillo de París, en el césped de Wimbledon o en el cemento de Canadá. Rafael Nadal no le da respiro a sus rivales, cualquiera sea la superficie.
Ayer el español le ganó en sets corridos al británico Andy Murray. Fue 7-6 (7-2) y 6-3 para alcanzar así la final del Masters Series de Toronto. 'Rafa' jugará hoy el partido definitivo ante el alemán Nicolas Kiefer, que se podrá ver por ESPN desde las 14:30.
No resultó fácil el juego para Nadal. Murray presentó dura batalla y el primer set se definió en el tie break, luego de que ninguno de los dos pudiera quebrarse el servicio. En la definición, el español, que suele no fallar cuando la situación así lo requiere, estuvo más certero y se llevó el parcial.
El segundo set, Nadal aprovechó las dos oportunidades de quiebre que tuvo, contra una de Murruy, y se llevó el partido al ganar la manga por 6-3. El partido fue parejo, pero la diferencia estuvo en la cantidad de errores no forzados. Murruy cometió 40, mientras que el español apenas 16.
Con el acceso a la final, el mallorquín quedará más cerca de Roger Federer en el ranking mundial, diferencia que se puede achicar aún más si logra ganar el torneo.
En la otra 'semi', el alemán Kiefer accedió a su primera
final en tres años, al francés Gilles Simon por 6-7 (4-7), 6-3 y 7-6 (7-5). La última vez que el germano se alzó con un título fue en Hong Kong 2000, y su última final fue en San Petersburgo en 2005.
La victoria del alemán, tras un partido de casi tres horas, puso fin a una racha de nueve triunfos consecutivos de Simon, número 23 del mundo, quien ganó la semana pasada el torneo de Indianapolis y en segunda ronda eliminó al suizo Roger Federer.
"Fue un partido muy cerrado, no fue fácil de jugar, cualquier cosa podía pasar", dijo Kiefer, quien atacó con ferocidad, con lo que logró unos 50 tiros ganadores. dijo el alemán, quien subirá varios escalones en el ranking de la ATP que saldrá mañana, donde actualmente es número 37.
