Ocho personas que habían sido secuestradas hace una semana por la guerrilla de las FARC en el noroeste de Colombia fueron puestas en libertad con mensajes amenazantes a transportistas, en tanto que dos siguen en poder de los rebeldes, se informó ayer oficialmente.
El Comité Internacional de la Cruz Roja en
Colombia (CICR) señaló en un comunicado que la liberación se produjo ayer en la población de Vigía del Fuerte, en el departamento de Antioquia (noroeste), tras una solicitud del grupo armado para que el organismo humanitario interviniera.
"La operación fue posible gracias a la interlocución confidencial y discreta de las partes concernidas y bajo la acción humanitaria, neutral e independiente del CICR", afirmó el organismo, que reiteró su "disponibilidad de apoyar la búsqueda de mecanismos para obtener la liberación de otros rehenes, así como de los demás detenidos en poder de los grupos armados".
El comandante de la Séptima División del Ejército, general Juan Pablo Rodríguez, aseguró que los guerrilleros dejaron libres a los rehenes debido a la presión de las tropas, que cerraron las vías de escape en una amplia zona en límites de los departamento de Chocó y Antioquia.
El secuestro ocurrió el pasado 17 de julio, cuando miembros del frente 34 de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) interceptaron una embarcación de pasajeros que se movilizaba por el río Atrato entre la población de Turbo, en Antioquia, y la ciudad de Quibdó, la capital de Chocó. Los guerrilleros secuestraron a 18 personas, pero horas después dejaron en libertad a las primeras ocho. (DPA)