El español Carlos Sastre consiguió ayer una impresionante victoria en la etapa reina del Tour de France, con llegada en la legendaria montaña de L'Alpe d'Huez, y se convirtió en el líder de la prueba.

El ciclista de CSC le sacó más de dos minutos al pelotón que lo perseguía y desplazó de la punta de la general al luxemburgués Frank Schleck, a quien ahora supera por 1m 24s.

"Creo que este triunfo es de todos aquellos que estuvieron conmigo cuando los necesité. Estamos todos felices, es un día maravilloso para todos nosotros", dijo el ganador de la 17 ª etapa, disputada entre Embrun y L'Alpe d'Huez, que culminó con una tremenda subida de 13,8 kilómetros.

"¿Si será posible mantener la ventaja en la contrarreloj? No lo sé, lo más importante ahora es recuperar bien. Voy a seguir luchando. Nos quedan cuatro días muy duros", agregó Sastre, quien ya había ganado una etapa en la actual edición del Tour y hasta el martes era cuarto en la general.

Sastre recorrió el trayecto de 210,5 kilómetros, que incluyó tres subidas de gran dificultad, en 6h 07m 58s, superando a su compatriota Samuel Sánchez y el luxemburgués Andy Schleck, por 2m 03s. Más atrás llegaron el español Alejandro Valverde y Frank Schleck, a 2m 13s.

El australiano Cadel Evans, uno de los candidatos a la victoria final, terminó en séptimo lugar, a 2m 15s de Sastre, al igual que la promesa rusa Denis Menchov. Evans está cuarto, a 1m 34s del nuevo dueño de la camiseta amarilla y seguido por una de las sorpresas, el austríaco Bernhard Kohl, a 1m 33s del puntero.

El desenlace del Tour promete ser apasionante y todo indica que será decisiva la contrarreloj individual del sábado, penúltima etapa antes de la final en París, el domingo.