ROCA (AR).- El presidente de la obra social provincial Ipross, Alcides Pinazo, reconoció ayer que la situación que atraviesan varias clínicas y sanatorios en la provincia es "complicada", aunque aseguró que algunas de esas unidades son económicamente "inviables". A pesar de esta situación aseguró que se está dialogando y analizando la deuda con cada uno de los prestadores para poder continuar con los servicios a los afiliados.
El médico estuvo ayer en el Alto Valle y mantuvo reuniones con referentes del Ipross tanto en Roca como en Regina, donde se analizó la situación de los prestadores y de los afiliados.
Para Pinazo, existen dos zonas que son claves en esta crisis. Y sus dirigentes son los que llevaron a la Federación de Clínicas de Río Negro (Feclir) a cuestionar la deuda de 12 millones de pesos que mantiene la obra social. Una de ellas es Catriel y la otra Valle Medio.
"El problema es que tienen unidades económicas inviables y no hay forma de solucionar esos problemas", dijo el funcionario provincial, quien se mostró sorprendido por los cuestionamientos surgidos desde la entidad que agrupa a las clínicas y sanatorios.