BOGOTÁ- El gobierno colombiano desautorizó un anunciado diálogo del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, con la guerrilla de las FARC, en una nota de protesta que remitió ayer a Managua y en la que anunció que llevará el caso ante la Organización de Estados Americanos.
El texto indica que el gobierno colombiano manifiesta "su más enérgica protesta" por las declaraciones del presidente Ortega "del 16 de julio en las que afirmó: 'nosotros tenemos toda la disposición a contribuir en este proceso de paz y le respondemos a los hermanos de las FARC que sí, que estamos dispuestos a conversar y a dialogar para aportar a la paz en Colombia'".
"El gobierno colombiano no autoriza ni avala gestión alguna que pretenda adelantar el señor Ortega en relación con una organización terrorista, en este caso las FARC, toda vez que constituiría una violación al principio de la no injerencia en los asuntos internos de los Estados", puntualizó la nota.
A renglón seguido advirtió que "cualquier actividad que se desarrolle en tal sentido tiene que contar con la aprobación del gobierno de Colombia".
A continuación, el gobierno colombiano del presidente Álvaro Uribe, manifestó su "rechazo al tratamiento de hermanos que da a los terroristas de las FARC, violando el consenso internacional sobre la lucha contra el terrorismo".
"Resulta ofensiva para la Nación colombiana que se otorgue ese tratamiento a los miembros de un grupo terrorista que comete crímenes de lesa humanidad, incluyendo el secuestro, el reclutamiento de menores, la utilización de minas antipersona, de armas no convencionales de efecto indiscriminado", añadió.
La nota de protesta, tras señalar que "las verdaderas amenazas para Colombia y la región son el narcotráfico y el terrorismo, anunció que Bogotá "presentará este caso ante la Organización de Estados Americanos, por tratarse de expresiones que violan la letra y el espíritu de la Convención Interamericana contra el terrorismo".
Precisó que "estas manifestaciones también son violatorias de las Resoluciones 1373 y 1269 de la Organización de Naciones Unidas (ONU), sobre la materia". La nota de protesta colombiana está firmada por el nuevo canciller Jaime Bermúdez, quien asumió el cargo ayer, tras lo cual informó a la prensa de la decisión del gobierno de Uribe.
El texto es la reacción del gobierno colombiano al presidente nicaragüense que en la noche del miércoles aceptó una invitación al diálogo formulada por las FARC para "aportar a la paz en Colombia", según dijo.
"Les respondemos a los hermanos de las FARC que sí, que estamos dispuestos a conversar, estamos dispuestos a dialogar, para aportar a la paz en Colombia", había dicho Ortega.
El mandatario respondió así a una solicitud de las FARC cadena multiestatal Telesur-, de tener conversaciones "personalmente o a través de un delegado" sobre asuntos de la guerra y la paz en Colombia. Ortega reiteró que cree que Colombia es el principal factor de inestabilidad en América Latina. (AFP/AP)