Con un gran cartel de "Más Democracia" en el palco y "300.000 personas escuchándolo", según la mentirosa estimación de la locutora del acto, Néstor Kirchner salió a hablar ayer frente al Congreso y llevó el saludo "de nuestra compañera Presidenta Cristina".
El jefe del PJ fue el principal orador del acto oficialista convocado en la Plaza de los Dos Congresos. Allí, luego de hacer un extenso repaso de los que consideró los éxitos de su gestión, señaló que su esposa, la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner, le pidió que "pusieran la otra mejilla", en relación al conflicto generado en torno a las retenciones móviles al agro.
"Hicimos muchas cosas. Y para eso necesité que me ayudaran. Ahora, les pido a todos aquellos que me acompañaron que hagan lo mismo con Cristina, una mujer con coraje", señaló.
Kirchner explicó que que "si la Presidenta hubiese querido quedar bien con todo el mundo, se hubiera abrazado en la oscuridad con todos los sectores" y que "para algunos, la solución es acordar de cualquier forma"; pero la presidenta defiende "la lucha por la redistribución".
El ex presidente aseguró, además, que Cristina "jura que va a respetarse la decisión del Congreso Nacional" sobre las retenciones móviles al agro "sea cual sea" el dictamen.
"Cuando digo que acá quisieron destituir al Gobierno nacional y popular lo digo con la fuerza de la realidad. Hoy empezaron a verse en los diarios abrazados unos a otros. Esos son los que quieren desestabilizar a la patria. Ahí están los que quieren enlodar las banderas de Perón y Evita claudicando ante la oligarquía", expresó, en alusión a los líderes del justicialismo y de otros partidos que participaron del acto organizado por los productores rurales.
"Hablan de democracia y cortan rutas. Hablan de democracia y desabastecen y queman campos. Como en las peores etapas salen como grupos de tareas a agredir a los que no piensan como ellos de manera vergonzosa", acusó y reveló: "la presidenta me pidió que pusiéramos la otra mejilla, porque por la patria vale todo".
Kirchner se refirió, también, expresamente a los productores rurales, a los que su Gobierno "desendeudó" y a quienes se "abraza porque no son nuestros enemigos ni con los que hay que tener cuidado, porque no son ellos los que quieren enriquecerse a costa de todo el pueblo argentino".
"Nuestros productores crecieron como nunca, por eso les pido que tengan la gratitud de aplicar toda la solidaridad que se pueda para que desaparezca la pobreza", afirmó.
Al terminar su discurso, pidió que "de esta plaza no salga un solo gesto de rencor y sí de dignidad" y pidió que "se terminen los cortes de ruta, los grupos de tareas y los esquemas de cobardía".
Antes de que el ex mandatario hablara hicieron uso de la palabra el Gobernador de la Provincia de Entre Ríos, Sergio Urribarri, quien aseguró que " volvieron los agoreros con sus protestas" y que " hay que desenmascarar a los mismos que están cambiando la piel, pero son los mismos lobos que hace quince años".
El segundo de los oradores fue el Gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli, quien se preguntó " quién en estos cinco años no ha progresado" y citando por tercera vez a Juan Domingo Perón indicó que no es momento de desatar peleas internas porque " para un argentino no hay nada mejor que un argentino".
El gobernador rionegrino, Miguel Saiz, estuvo en el palco. (DyN, R. Central)
