Fabio "La Mole" Moli retuvo el título argentino de los pesados tras superar en Tucumán al local Manuel "La Bestia" Pucheta, en un fallo que generó polémica, ya que parecía una definición por nocaut en el primer round, pero el perdedor fue descalificado.

El combate, pactado a 10 asaltos, se definió a los dos minutos y medio del primero, cuado Moli (119,400 kilos) conectó un golpe tremendo que envió por segunda vez a la lona a Pucheta (100,500), quien quedó tendido sobre el cuadrilátero boca abajo y sin reacción durante 10 minutos.

Sin embargo, el árbitro Ángel Romero sorprendió cuando dio a conocer el fallo de "ganador Moli por descalificación", lo que generó malestar en el cordobés.

"Los colaboradores de Pucheta invadieron el ring antes de que yo pueda comenzar la cuenta de protección", explicó Romero.

Al enojo de Moli se sumó el del público tucumano, que le recriminó al árbitro no haber parado el combate cuando Pucheta no mostraba signos de reacción y lo expuso a recibir un tremendo castigo del campeón.