LA HABANA (DPA/AP) El presidente de Cuba, Raúl Castro, afirmó que continúa "estudiando íntegramente" el problema del salario, "para irlo incrementando de manera gradual". Sin embargo, advirtió a los cubanos que deben esperar un socialismo "realista'' que elimine el igualitarismo, los subsidios excesivos y económicamente sostenible.
"La solución de este problema dependerá de la situación económica del país, inevitablemente vinculada a la crisis existente hoy en el mundo, la cual puede incluso agravarse", dijo el jefe de Estado en el discurso de clausura de la primera reunión ordinaria del Parlamento. Fue su primera sesión parlamentaria como presidente de la isla, que evaluó medidas para enfrentar los problemas más acuciantes de los cubanos, pero no contó con anuncios espectaculares.
Raúl Castro, vistiendo una guayabera blanca en lugar del uniforme militar, afirmó: "Es mi deber expresarlo con franqueza, pues no sería ético crear falsas expectativas. Decir lo contrario sería engañarlos".
"Todos quisiéramos ir más rápido, pero es necesario actuar con realismo, como no lo hacen quienes propalan por todo el mundo la absurda aunque nada ingenua mentira, de que un trabajador cubano gana como promedio el equivalente a 17 dólares mensuales", añadió.
"Lo hacen a sabiendas de que con 20 veces esos 17 dólares, por decir una cifra bien conservadora nadie en ningún país capitalista puede pagar aquello a que tienen acceso normalmente cualquier familia cubana", denunció. "No significa que estemos satisfechos con lo alcanzado. Conocemos las dificultades, los productos escasean o no alcanzan, y trabajamos para que sean menos cada día", enfatizó.
Indicó que "éstas no son cuestiones que se resuelvan con un decreto. En nuestro caso son aún más complejas porque la Revolución no aplica las llamadas 'terapias de choque', que no son más que cargar sobre el pueblo todas las consecuencias de la crisis".
Advirtió que para que el trabajador se sienta dueño de los medios de producción es muy importante que sus ingresos se correspondan con el aporte personal y que su centro laboral cumpla con su objeto social y alcance la producción o la oferta de servicios que tiene establecido. Para lograr esos objetivos citó cuatro premisas que calificó de "insoslayables" como que ese trabajo aporte lo que todos después demandan recibir, el orden, control y rigurosa exigencia, la eliminación de las gratuidades indebidas y el exceso de subsidios, así como un adecuado sistema de impuestos y contribuciones. "Socialismo significa justicia social e igualdad, pero igualdad de derechos, de oportunidades, no de ingresos. Igualdad no es igualitarismo. Este, en última instancia es también una forma de explotación: la del buen trabajador por el que no lo es, o peor por aún el vago", señaló. En otra parte, Raúl Castro informó que se estudia un Proyecto de Ley de Seguridad Social que elevará las edades jubilatorias de los ciudadanos cubanos en cinco años. También adelantó que su gobierno comenzará "en fecha próxima" a entregar tierras ociosas en usufructo a quien produzca y llamó a "virarse para la tierra y hacerla producir". Asimismo nombró medidas para facilitar los suministros, aumentar el precio de compra a los productores y la descentralización administrativa del área.
