McLaren llegó a un acuerdo para zanjar su disputa con Ferrari y aceptó pagar los gastos legales de la escudería italiana por el escándalo de espionaje en la Fórmula Uno.
El team inglés se disculpó en diciembre después que información y documentos de Ferrari fueron encontrados en la casa de su principal diseñador, lo que produjo una multa histórica de 100 millones de dólares para el equipo británico y la descalificación del campeonato de constructores de 2007.
"Ferrari y McLaren aceptaron ponerle fin a las disputas entre ellos", dijo McLaren en un comunicado. "También aceptó reembolsar los gastos de Ferrari relacionados con este asunto y con un pago final", siguió.
Los italianos emitieron un comunicado en el que acepta la disculpa y... todos felices.