Después del faltazo del lunes, ayer, Hugo Ibarra apareció por Casa Amarilla y aunque tampoco se entrenó, sí terminó de arreglar su continuidad en Boca por un año más. Una vez que finalizaron los trabajos de los jugadores "xeneizes", el "Negro", quien pasó por el consultorio médico, se reunió con José Beraldi, dirigente encargado del Departamento de Fútbol Profesional.
En ese encuentro se llegó a un acuerdo total, que luego se homologó por la tarde, cuando se encontraron Ibarra con el presidente de Boca, Pedro Pompilio, y firmaron el contrato. Por su parte el mediocampista Pablo Ledesma, quien fue transferido al Catania, de Italia, a cambio de 4 millones de dólares, practicó ayer por última vez en el plantel de Boca antes de sumarse a su nuevo club. Y Mauro Boselli firmará en las próximas horas con Estudiantes.
Mientras se definen incorporaciones, ventas y demás, los jugadores de Boca continuaron trabajando, preparándose para viajar el próximo viernes hacia Estados Unidos, donde permanecerán doce días, para después partir rumbo a Europa, donde jugarán una serie de partidos amistosos.
Dado el elevado número de jugadores profesionales con que cuenta Boca, el grupo se dividió en dos: uno comenzó trabajando en el gimnasio y después lo hizo en el campo, mientras que el otro cumplió con la misma rutina pero en orden inverso.