Respecto de la decisión del gobernador de la provincia de establecer un nuevo acuerdo con las petroleras que operan los distintos yacimientos de hidrocarburos líquidos y gaseosos de la provincia del Neuquén, entendemos que la discusión central del tema pasa por el destino de los fondos obtenidos de tal negociación y no por la tratativa en sí misma.

Básicamente pienso que la provincia tiene esta última oportunidad de comenzar la tan anunciada y nunca concretada tarea de rediseñar la matriz productiva provincial para reemplazar a ésta, totalmente dependiente de la renta petrolera. Teniendo en cuenta algunos elementos que a mi entender nunca fueron puestos seriamente en consideración, como el hecho de que el modelo económico actual en la provincia depende de un recurso no renovable y que las variaciones de precios del mismo no tienen relación en absoluto con nuestra voluntad sino, por el contrario, de los volúmenes de los grandes productores mundiales y de las decisiones geopolíticas en las que nunca participaremos, es lo que hace a este modelo provincial exitoso pero de poca sustentabilidad. Es por eso que debemos manejar los recursos no renovables en beneficio de las futuras generaciones, "fabricando" un modelo de provincia sustentable aunque, a mi entender, éste será más austero que el actual.

Cuándo comenzaremos con la transición a este nuevo modelo sino ahora, que los precios de los hidrocarburos son altísimos con posibilidades de permanecer y no esperar a que por factores -que ya expliqué no manejamos- bajen este precio y hagan imposible la tarea.

Debo decir que hay temores de que nos pase como con los 780.000.000 de regalías mal liquidadas que recibió ya esta provincia y que fueron a parar a la basura. Es por eso que creo que el tema es cómo se utilizarán los fondos extraordinarios y no si debemos obtenerlos o no.

Se necesitan realizar obras de infraestructura prioritarias por localidad pensando en las nuevas generaciones. Invertir en turismo pavimentando todas las rutas de acceso a los destinos, en hotelería abriendo paso luego a la inversión privada para terminar de afianzar esos lugares turísticos; en forestación, en las áreas que lo permitan; en dotar de riego a todos los valles de los ríos provinciales para aumentar la superficie cultivable. Crear alternativas laborales que no dependan del Estado, sobre todo en el interior provincial, donde es la única opción de trabajo para los jóvenes que se incorporan al mercado laboral.

Como pienso que es ésta la última oportunidad que tenemos, se deberá paralelamente desarrollar una empresa estatal que permita a partir del 2025 recibir los yacimientos y continuar con su explotación, cosa que hoy no están en condiciones de realizar, mucho menos aun atender lo referente a gas y petróleo plus de rápida generación de fondos extras para nuestra provincia.

La discusión generada en torno de la legalidad de la medida tiene distintos enfoques: a mi entender, una la expresada en el artículo 96 de la Constitución provincial, en el que habla del ente autárquico provincial o nacional para las concesiones, y el artículo 100 que expresa que los contratos terminarán indefectiblemente en la fecha establecida. De los entes autárquicos, léase Enarsa e Hidenesa, ya conocemos que en realidad son empresas sin ninguna posibilidad de explotar los yacimientos y que necesitan inversiones importantes para transformarse en aptas para esta función.

Es necesario destacar también que estos artículos de la carta magna provincial fueron invocados por el entonces diputado provincial y hoy diputado nacional Oscar Massei en el debate de la ley de transferencia del yacimiento El Mangrullo a las ciudades de Cutral Co y Plaza Huincul cuando dice: "Hoy los artículos 96 y 100 de la Constitución de la provincia del Neuquén son letra muerta; si nosotros tomamos la letra fría de estos artículos, en este momento estaríamos inmobilizados de explotar los hidrocarburos" y tomando los artículos 74 que dice que "la organización de la economía y la explotación de la riqueza tienen por finalidad el bienestar general, respetando y fomentando la libre iniciativa privada" y el artículo 22 que en su segundo párrafo expresa que "deberán removerse los obstáculos de orden económico y social que impidan el pleno desarrollo de la persona humana".

Mi propuesta es que por última vez se autoricen las prórrogas de los contratos, que éstas pasen por la Legislatura para su debate y aprobación y que los fondos extraordinarios obtenidos sean utilizados -como expliqué anteriormente- para crear otro modelo económico sustentable para nuestra provincia.

HUGO ALBERTO GONÇALVES (*)

Especial para "Río Negro"

(*) Diputado peronista, Bloque Alternativa Neuquina