CHOS MALAL (ACHM).- Un hombre fue a juicio por el delito de usurpación de aguas: está acusado de cortar el líquido que viene de un arroyo y no permitirle el ac
ceso a una familia de crianceros. Pidieron una condena de 8 meses de prisión; el fallo se conocerá mañana.
La audiencia del juicio oral y público contra Pablo Muñoz, administrador de la estancia Cancha Huinganco, se llevó a cabo el pasado 2 de julio en la sala de debates del Juzgado Correccional de Chos Malal, a cargo del juez Leandro Nieves.
El fiscal Andrés Azar solicitó se lo condene a la pena de 8 meses de prisión por el delito de usurpación de aguas. La sentencia se dará a conocer mañana en horas del mediodía.
Integrantes de la Mesa Campesina estuvieron presentes durante gran parte del debate, en un claro respaldo a la familia Vázquez-Jorquera que son los que han resultado damnificados por el corte del agua.
"El hecho por el que se lo acusa es por cortar el agua que viene del arroyo Tuyuco" indicó la Mesa Campesina.
Para los dirigentes la falta de agua ha perjudicado seriamente a la familia Vázquez-Jorquera, dado que hace dos temporadas se les seca la huerta familiar y también frutales, pasturas y los álamos, árboles característicos de cada uno de los lugares donde se encuentra asentada una familia de crianceros. "El agua es un derecho de todos no se la puede cortar a nadie" se quejaron desde la Mesa Campesina. Aseguraron que con el accionar del administrador de la estancia de Cancha Huinganco "se han violado muchos derechos".
En este aspecto hicieron referencia a la "soberanía alimentaria que es nuestros derechos a decidir que alimentos queremos comer y producir", también el derecho a "la cultura, dado que la auto producción de alimentos es parte esencial de la cultura campesina". Dijeron que también se afectó el "derecho a una vida digna, al trabajo, a la salud, al desarrollo integral y digno de los seres humanos".
Se refirieron a lo que calificaron hechos "asombrosos" ocurridos durante el debate. Uno de ellos la declaración del representante de Recursos Hídricos, "ya que informó que desde la creación de esa oficina en Chos Malal nunca se aplicó el código de agua de la provincia del Neuquén y que sus tareas se limitan a intentar resolver los conflictos como mediadores de buena fe".
