ROCA (AR).- Para los hoteleros de Río Negro, la situación que están atravesando es al menos preocupante. La crisis del campo, la suba de los costos, la presión fiscal y la crisis en la que parece estar entrando el país ya provocó una paralización de la actividad en la provincia que -en algunas ciudades- trepa hasta el 60 por ciento.

"Ya estamos haciendo las cosas como lo hacíamos en el 2001", dice Olga D'Amato, del hotel Patagonia de Cipolletti. Y aunque parezca una exageración, la empresaria gastronómica remarcó que el retroceso en las ventas los llevó a tomar medidas extremas como la reducción de personal y de gastos.

Si se comparan las cifras de ocupación que a esta altura del año se registraban en el hotel, solamente se está trabajando con un 20 por ciento de la cantidad de pasajeros que habían llegado en el 2007. "Es verdad que mayo y junio es tranquilo. Nosotros nos manejamos con personas que viajan por negocios, pero la perspectiva económica bajó notablemente la ocupación hotelera", comentó .

Para colmo, la temporada en los centros invernales regionales también pinta para el olvido. Las cenizas del Chaitén, la poca nieve, la falta de combustible y la inestable economía, empujó a los hoteleros a evaluar que la cantidad de turistas que pasarán en las vacaciones de invierno será menor.

Para la presidenta de la Asociación Empresaria Hotelera Gastronómica de los Valles de Río Negro, Mirta Martín, el panorama abarca a todo el sistema hotelero y gastronómico, donde la caída en los alojamientos y en las reservas para los próximos meses es notable. "Estamos en una situación difícil y con un panorama a futuro realmente complicado", sostuvo.

En Valle Medio y la Costa

Los problemas también se pueden observar en Valle Medio. Alberto Nebbia, del hotel Andes, de Choele Choel, sumó otros elementos al "crítico panorama", como el incremento salarial (por ende el de las cargas sociales) lo que significó un fuerte impacto. "Cuando salíamos de la crisis del 2001 el gobierno provincial nos puso una alícuota por Ingresos Brutos del 3 por ciento, cuando habíamos padecido una fuerte crisis en todo el sector", dijo el dirigente de Valle Medio.

"Se ha parado el país". Así lo consideró la vicepresidenta de la Comisión de Turismo de Las Grutas y San Antonio e integrante de la Cámara de Hoteleros y Gastronómicos de la zona Atlántica, Mónica Toransa. La empresaria, propietaria de un hotel ubicado frente al mar en la villa turística, también adjudicó esta situación que repercute desfavorablemente en la actividad turística, al conflicto con el campo, los problemas climáticos, la ceniza del volcán Chaitén y a la escasez de combustible.

Sostuvo Toransa que en averiguaciones hechas recientemente con pares de Puerto Madryn -ciudad en la que ya comenzó el avistaje de ballenas- "también supimos que anda muy poca gente. Todo esto repercute muchísimo en el turismo", afirmó.