CIPOLLETTI (AC).- El jardín donde hace más de tres meses falleció un bebé fue rehabilitado para funcionar pero por ahora sigue cerrado. En la causa judicial se tomaron varias testimoniales y se espera el resultado de una pericia anatomopatológica para avanzar en la investigación. No hay imputados.
En realidad la clausura condicional fue levantada unas semanas después de que el juzgado municipal de Faltas dispusiera la medida (la aplicó el 7 de abril), porque la justicia dijo que no había motivo para que se mantuviera la inhabilitación y por lo tanto, se levantó.
De todas maneras hasta el momento las autoridades del jardín de infantes , no han reabierto las puertas de la institución que funcionaba en González Larrosa 850.
Desde Comercio de la municipalidad se informó que la propietaria tampoco inició trámites para habilitar otro jardín.
El fallecimiento de Francisco ocurrió el 31 de marzo pasado. Fue su padre, Enrique Figueroa, quien se percató de la situación.
Como habitualmente lo hacía, fue a buscar a su hijo al jardín maternal. Ese día lo hizo acompañado de la abuela del pequeño.
La maestra que estaba a cargo de su cuidado se lo entregó en el carrito, y cuando su padre lo levantó se dio cuenta que algo malo pasaba. Después de los primeros auxilios que le brindaron en el mismo jardín, el bebé fue trasladado al hospital pero llegó sin vida.
Según la autopsia, el bebé se ahogó luego de regurgitar la leche que había consumido. De todos modos, a pedido del abogado de la directora del jardín se encomendó una pericia anatomopatológica para tener más precisiones de la causa del deceso.
Actualmente las partes están a la espera de los resultados de este estudio para ver cómo avanzará la causa, que está en manos de la fiscal Silvana García y de la jueza de instrucción María del Carmen García García.
Se supo que se recepcionaron varias testimoniales, entre ellas, a los médicos y enfermeros que asistieron al bebé, además del vecino que le realizó la reanimación en el establecimiento y el papá y la abuela.
