El sueño se le hizo realidad ayer a la madrugada en el Luna Park. Después de fracasar en dos intentos, Hugo Garay se consagró campeón mundial de los mediopesados de la AMB. Venció por puntos en fallo unánime al ucraniano Yuri Barashian.

"Me sacrifiqué mucho para conseguir este título. Ahora tengo que entrenar el doble para mantenerlo. Si perdía terminaba mi campaña. Pero por suerte gané y sigo", señaló el "Pigu" en medio de lágrimas.

En la velada desarrollada en el mítico Luna Park, ante unos diez mil aficionados, Garay cristalizó un sueño que comenzó hace cuatro años con aquellas dos caídas en Dortmund y Hamburgo, con fallos polémicos y divididos frente al húngaro Zsolt Erdei, y muchos contratiempos.

A diferencia de sus dos anteriores intentos por llegar al título, el argentino contó esta vez con el beneficio de la localía.

"Le voy a arrancar la cabeza", prometió un confiado Garay en la previa. Y si bien no fue para tanto, marcó diferencias rápidamente en las tarjetas.

Sin embargo, en el décimo round, el ucraniano fue en busca de una victoria por la vía rápida e hizo valer su zurda picante. El argentino, por primera vez, vio peligrar la conquista del cinturón.

Empujó la gente desde afuera y Garay puso lo suyo para sacar adelante los dos últimos asaltos y emular al inolvidable Víctor Galíndez, quien en 1974, también en el Luna Park, consiguió el mismo título que estaba en juego el pasado miércoles.

Más allá de que tuvo que guapear a partir del décimo round, Garay sacó una amplia diferencia en las tarjetas, donde ganó por 118-111, 118-110 y 120-108.

"Estoy muy emocionado", aseguró el argentino, quien ahora ostenta un récord de 31 victorias (17 nocauts) y 3 derrotas. La fiesta fue completa en el Luna, porque en la otra pelea en la que estaba en juego un título del mundo, Marcela Acuña no tuvo inconvenientes para retener una vez más el cinturón supergallo de la Asociación después de vencer por puntos en fallo unánime a la canadiense Danielle Bouchard. (Ver aparte).

El nocaut que sufrió el ex campeón mediano de la OMB, Héctor Velazco, puso la nota de dramatismo y tristeza de la velada del Luna Park.

El venezolano Gusmyl Perdomo lo tiró en cuatro oportunidades en los dos rounds que duró la pelea donde estaba en juego el título Fedelatin AMB de los supermedianos.

Velazco, quien anunció que se retirará de la actividad, fue derribado una vez en el primer asalto y en tres ocasiones en segundo round de una pelea claramente favorable al venezolano.