BUENOS AIRES (DyN) - Un anestesista que intervino en una operación de apendicitis en la que murió una joven de 18 años quedó ayer detenido acusado de homicidio con dolo eventual, mientras fuentes de la investigación revelaron que el profesional estaba inhabilitado para ejercer en dos provincias, Santiago del Estero y Tucumán, por su ejercicio profesional.

Romero Hiriart quedó detenido tras la indagatoria realizada por la fiscal adjunta de la Unidad Funcional de Instrucción número 4 de Morón, Valeria Courtade, quien investiga la muerte de una joven de 18 años ocurrida el viernes mientras era sometida a una cirugía de apendicitis en la Clínica Magnasco, ubicada en la localidad bonaerense de Haedo. Los otros dos médicos, cirujanos, involucrados en la operación de apendicitis de la joven recuperaron la libertad tras prestar declaración indagatoria ante la fiscal. Uno de los médicos, un cirujano de 32 años, fue indagado por supuesto homicidio culposo y falsedad de instrumento público, mientras el otro, de la misma especialidad, de 54 años, declaró por presunto falso testimonio.

La detención del anestesista y de los dos médicos se produjo tras una llamada al número de emergencias de la policía, 911, en la que los padres de la joven fallecida denunciaron mala praxis. En declaraciones a Todo Noticias, el padre de la joven dijo: "Mi hija ingresó al quirófano a las 19 y a las 20 llegó un hombre que nunca pensé que era el anestesista porque ingresaba tambaleándose, quiso agarrar el picaporte de una puerta y se tambaleaba". El hombre añadió que tras una hora de cirugía el anestesista salió del quirófano para hablar con los familiares y afirmó: "Yo hice bien la operación pero no se despierta y no puedo hacerla volver".

Las palabras del anestesista fueron grabadas por un familiar con un teléfono celular.

En el operativo de aprehensión de los médicos intervino personal de la comisaría segunda de Morón, encabezado por el capitán Rogelio Ordoqui. "El anestesista tenía en su bolsillo una caja de ansiolíticos y suponemos que antes de la operación había ingerido algunos, porque al hablar y moverse estaba como lerdo", dijo a esta agencia Ordoqui.

El director de la clínica manifestó que la entidad "instruye un sumario interno para determinar las responsabilidades de los médicos en el hecho".