NEUQUÉN (AN).- Una decena de integrantes de asociaciones protectoras de animales realizaron ayer en el Valentina Sur rural una protesta en rechazo al inminente desalojo de un refugio canino, donde con mucho esfuerzo una docente jubilada cría a más de 150 perros. Desde allí se solicitó a la comunidad que colaboren para trasladar íntegramente el asilo porque -se advirtió- la chacra donde funciona será loteada.

Estela Villafañe fue durante años profesora de música. Desde hace más de un década su pasión no son los acordes sino los perros, y es por eso que mantiene con su propio esfuerzo el mayor refugio de la ciudad, y el único que ha logrado dar en adopción hasta seis perros por semana.

Pese al esfuerzo de esta mujer, la justicia dictaminó que debe desalojar la chacra que desde hace años ocupa. La notificación legal parece haber llegado en el peor momento pues un grupo de vecinos también reclamo por el traslado del complejo. Los vecinos aseguran que más de una decena de perros invaden la calle lindera e incluso muerden a los transeúntes.

"Mis perros son buenos, no puedo creer que hoy el municipio me notifique de siete denuncias por mordeduras, cuando hasta el domingo no tenía ni una", indicó Villafañe a la vez que recordó con tristeza que "es la primera vez que viene el municipio en mucho tiempo porque incluso desde hace dos meses me dejaron de dar el subsidio de alimentos que tengo aprobado desde el 2005".

Acompañada por una decena de integrantes de la Asociación Los Amigos del Perro (ALAP) Estela reclamó a la sociedad que no le "den la espalda como hacen con los perros callejeros" y aseguró que "lo que necesitamos es otra chacra, en una zona rural, y con varias hectáreas para los perros, para poder ahí volver a construir los caniles".

"No tengo dinero"

Mientras señaló que "en China Muerta hay una chacra que sería excelente para trasladarnos", Villafañe reconoció que "lamentablemente no tengo dinero para arreglar estos caniles y por eso hay varios perros que andan sueltos".

Desde ALAP reclamaron que se efectivicen los aportes para los refugios caninos que contempla la nueva ordenanza de control canino y advirtieron que "si efectivamente desalojan a Estela ¿quién se va a hacer cargo de estos 150 perros?".

Mientras una decena de perros sigue ansiosamente cada paso que da Estela por el refugio, la mujer explicó que "yo hago esto prácticamente sola porque tengo sólo el apoyo de algunos amigos como una farmacéutica que me regala algunos medicamentos para curar a los perros" y agregó que "ni siquiera tengo el apoyo del municipio para esterilizar a los perros nuevos, sino que yo misma tengo que llevarlos a donde esté el quirófano móvil y después traerlos de nuevo".