NEUQUÉN (AN).- De todos los homicidios que se cometieron sólo cinco casos, que involucran seis muertes, no han sido esclarecidos.

El 28 de febrero en la toma Nueva, un hombre quemó la casilla con sus dos hijos, de 8 y 5 años, adentro. Ambos menores murieron calcinado. El hombre quedó en libertad por falta de mérito.

El 15 de marzo, asesinaron a balazos a Rodrigo Villalón (18) mientras estaba en la puerta de su casa en el Barrio Alto Godoy. Un día después, en el Barrio San Lorenzo asaltan a la almacenera María Contreras y le pegan un tiro en el cuello. La mujer murió un mes después. Ambos casos están irresueltos.

Los dos últimos casos sin resolver tiene como víctima a dos hombres oriundos de Bolivia. Uno de los crímenes ocurrió el 28 de marzo en la toma Almafuerte II, donde para robarle la moto le pegaron un tiro en la pierna a Deymar Yarvi (30), que falleció desangrado.

El otro hecho se produjo el pasado 11 de junio en Cordón Colón donde tras una golpiza ahorcaron a Olivera Droguer (27). Según los pesquisas en ambos casos hay datos ciertos para concretar algunas detenciones a la brevedad.

Un párrafo aparte merece el hecho ocurrido el 12 de abril en Centenario, donde bomberos encontró en un canal de riego, ahogados, a una madre de 17 años y sus dos pequeños hijos, de 2 años y un bebé de meses. La causa, que está sin esclarecer, está caratulada como muerte dudosa reservada por la Fiscalía. Esto se debe a que se encontraron indicios de homicidios y suicidio. La investigación continúa.