MADRID (DPA, AP y AFP).- Madrid recibirá a partir de mañana un Congreso Mundial del Petróleo con la crisis de los precios como telón de fondo y en el que se darán cita destacados representantes de empresas energéticas, ministros del ramo y expertos procedentes de una veintena de países.
Hasta el jueves y bajo el lema "Un Mundo en Transición: Suministro de Energía para un Crecimiento Sostenible", analizarán los retos, las tendencias y las líneas de trabajo de cara al futuro de la industria petrolera.
El tema de los precios, que superaron la semana que termina el récord de los 140 dólares por barril, no figura en la agenda, pero seguramente estará presente en los debates debido a su alta incidencia en la crisis económica mundial.
En este sentido, la OPEP ya lo anticipó: insistirá en que el problema del precio del crudo no es una escasez de oferta.
Es la visión que, si bien diverge de la de los consumidores que piden un incremento de los suministros de la OPEP para abaratar el oro negro, será nuevamente defendida por los productores en el Congreso Mundial del Petróleo que se abrir en Madrid.
Por la capital española pasarán los ejecutivos de Repsol YPF, Pemex, ExxonMobil, Total, Rosneft y BP, entre otras empresas petroleras.
También estará el ministro de Energía e Industria de Qatar, Abdullah bin Hamad al-Attiyah; el de Energía y Petróleo de Venezuela, Rafael Ramírez Carreño, y el de Petróleo de Arabia Saudí, Al Naimi, por citar algunos de los responsables de carteras energéticas.
El congreso estará dividido en sesiones plenarias, ministeriales y de otro tipo, así como sesiones técnicas dedicadas a la extracción, el refino, el gas natural, las energías renovables y la gestión de la industria.
De forma paralela, organizaciones sociales han convocado en las mismas fechas un encuentro social para, entre otras cosas, debatir sobre alternativas a la dependencia del petróleo y en contra del congreso en la capital española.
La OPEP estará representada por su secretario general, el libio Abdalá El-Badri, al tiempo que se espera también la participación de casi la totalidad de los ministros del sector de los trece países miembros del grupo.
El programa oficial del Congreso no prevé abordar el problema de los precios actuales del barril de crudo, sino que se centra en un intercambio sobre tecnologías y políticas para el futuro del sector, la espectacular subida de las cotizaciones hasta rozar los 140 dólares, doblándose en un año, estarán omnipresentes en los encuentros con la prensa.
Desde su última conferencia en marzo en Viena, la OPEP ha reiterado de forma insistente que el mercado está bien abastecido y que no prevé revisar el nivel de sus suministros hasta el 9 de septiembre, cuando volverá a reunirse en la capital austríaca.
Esto significa que se mantiene estable, en 29,67 millones de barriles diarios (mbd), la cuota oficial de producción del grupo, que abarca el bombeo de doce de los trece países miembros (todos menos Irak).
Sin embargo, en los últimos meses Arabia Saudita ha aumentado su bombeo hasta 9,45 millones de barriles diarios (mbd) y ha anunciado este mes que elevará ese nivel hasta los 9,7 mbd en julio, mientras su parte oficial en la cuota sigue siendo de 8,9 mbd.
El último aumento fue anunciado por Riad poco antes de celebrarse el pasado día 22, en la ciudad saudita de Yeda, un inusual encuentro de los máximos responsables del sector energético de los principales países productores y consumidores de crudo, así como con organismos internacionales y directivos de compañías petroleras, para tratar sobre la más reciente escalada de los precios.
No obstante, a pesar de la medida adoptada por el reino aparentemente en respuesta a los pedidos de aumentos de la oferta de los consumidores, el ministro saudí de Petróleo, Ali I. Naimi, reiteró que los precios suben por una "percepción errónea" que domina los mercados: el peligro de escasez.
