El proyecto de asfaltado de la Ruta Nacional 23 contempla la construcción de una ruta de segunda categoría.

Una modificación del proyecto original para adecuarlo a las condiciones climáticas de la zona llevó a ensanchar las banquinas un metro más hacia cada lado.

La construcción de la nueva traza incluye una base granular de 20 centímetros de espesor, un sub-base de 15 centímetros de suelo seleccionado y una carpeta asfáltica de 5 centímetros.

Tiene un ancho de 6,70 metros -40 centímetros menos que una ruta de primera categoría- y tres metros de banquinas hacia ambos lados que le dan un mayor margen de maniobra.

Trocha paralela

Se dispuso un ancho de camino de 50 metros ya que el proyecto de obra contempla la posibilidad de construir en el futuro una trocha paralela a la actual, si el tránsito -sobre todo de camiones- lo requiere por el Corredor Bioceánico.

En este sentido, los alambrados se ubican a unos 15 metros de la banquina derecha y a 35 de la banquina izquierda. (AJ)