NEUQUÉN (AN).- En un intento por revertir el pésimo nivel de recupero, el Instituto Provincial de Vivienda y Urbanismo (IPVU) comenzó un minucioso relevamiento de las viviendas que adjudicó en su historia para obligar a sus moradores a escriturarlas. Además, en los casos en los que aún no se hubiera saldado el inmueble se instará a sus adjudicatarios pautar una hipoteca.
Así lo indicó ayer el subsecretario de Vivienda de la provincia y titular del IPVU y de la Agencia de Desarrollo Urbano Sustentable (ADUS), Herminio Balda, quien explicó que está firmando "por día cerca de veinte escrituras y la idea es poder ir regularizando todas las viviendas que el IPVU entregó en toda la provincia".
Balda señaló que el organismo está "haciendo un relevamiento minucioso porque en realidad no se sabe exactamente cuántas viviendas entregó el IPVU" y advirtió que "como hay gente que vendió estas casas, consideramos como adjudicatario a toda familia que lleve allí viviendo más de dos años".
El funcionario explicó que "el nivel de recupero es malísimo, porque es cercano al 3%". Dijo que "si bien no se
sabe tampoco cuánto es lo que hay que cobrar existe un estimativo de diez millones de pesos , de los cuales se cobra sólo cerca de uno".
"Desde hace un tiempo, y de ahora en más toda vivienda que entreguemos tanto por el IPVU como por la ADUS va a ser con escritura e hipoteca antes de que la familia ingrese a la casa, porque si no la gente o no paga o no lo escritura nunca más".
Balda explicó que "la idea es poder sanear las cuentas del IPVU de cara a un proyecto que estamos desarrollando para que el instituto pueda volver a construir viviendas, sobre todo para el segmento de la clase media que hoy es el que queda excluido de los planes habitacionales nacionales".
En este sentido Balda indicó que "la idea es poder retomar la construcción de viviendas hacia fines de este año, pero eso dependerá de que haya un crecimiento en los ingresos de fondos al gobierno provincial".
Mientras tanto, el funcionario aseguró que están "analizando los modelos de viviendas que se han hecho en otros puntos del país, para que no sean las típicas casas cuadradas, sino algo más vistoso, y sobre todo queremos aprovechar los materiales que tenemos en la zona, como la madera".
Si bien el funcionario advirtió que "esto es un anhelo pero no una certeza", destacó que "la idea es que esas casas se emplacen en la urbanización de la meseta que está desarrollando el municipio neuquino".
En paralelo Balda aseguró que en el gobierno están "resolviendo un poco la situación financiera de la ADUS, que es mala, porque desde septiembre hasta hace poco no llegaron los fondos que el gobierno nacional debe girarnos para la construcción de los planes de vivienda" federales.