SAN MIGUEL DE TUCUMÁN.- La XXXV Cumbre de jefes de Estado del Mercosur que se celebrará el próximo martes en Tucumán, dará un fuerte impulso a la integración productiva del bloque y ratificará el repudio regional a la nueva política inmigratoria de la Unión Europea.
"Siempre ha habido una visión de acuerdo comercial como única variable dinamizadora de la integración, pero lo que queda claro hoy es que ese proceso integrador es mucho más amplio y una de sus dimensiones fundamentales es la integración productiva", afirmó ayer el ministro de Relaciones Exteriores argentino, Jorge Taiana.
El canciller sostuvo que "la integración productiva tiene que ver con la creación de cadenas de valor, con un tratamiento profundo del tema de las asimetrías, y con los ámbitos sociales, culturales y políticos".
El programa de integración productiva se centrará en la creación de un fondo para las pequeñas y medianas empresas (pymes), que en un principio funcionará como garantía para las firmas que soliciten créditos bancarios, informaron fuentes de la Cancillería.
El objetivo es impulsar la inserción a las cadenas productivas integradas por diferentes países del bloque y acelerar el acceso a las nuevas tecnologías, en un mecanismo que busca promover la convergencia de las economías y evitar la reproducción de desigualdades competitivas.
El potencial productivo del Mercosur debe ser fomentado en el marco del incesante aumento de la demanda mundial de alimentos, indicaron.
Asistirán a la cumbre los presidentes de los cuatro países miembros del Mercosur: Argentina, Cristina Fernández de Kirchner; Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva; Paraguay, Nicanor Duarte Frutos; y Uruguay, Tabaré Vázquez. También asistirá Hugo Chávez, mandatario de Venezuela, que está en proceso de adhesión plena al bloque. Confirmaron además su participación los jefes de Estado de Chile, Michelle Bachelet; Bolivia, Evo Morales; y Ecuador, Rafael Correa. (DPA)
