"Me sacaron lo que más amaba en la vida. Y por eso estoy conforme con el pedido de prisión perpetua. Sentí alivio". Con estas palabras Magalí Césari enfrentó ayer a los medios de comunicación, una vez que terminaron los alegatos.

La joven aseguró que fue un año de mucho esfuerzo donde tuvo que completar un largo camino pero comentó que la sentencia será el cierre de una etapa dolorosa de su vida. "Espero que se haga Justicia", dijo la joven, mientras se encontraba prácticamente rodeada por varios familiares de Frutos, quienes escuchaban atentamente y en silencio sus palabras.

Del otro lado del pasillo Luis Frutos, el padre del acusado, aseguró que su hijo era "inocente" y pidió esperar hasta el fallo para que se conozca la verdad de lo que ocurrió hace más de un año atrás en las cercanías a la ruta 65.

"El (por Miguel) está muy mal. Estamos tratando de ayudarlo psicológicamente pero creo en la Justicia", dijo el papá del menor quien asistió a la sala acompañado del resto de sus hijos.

(AR)