"Yo sé como ganar la Copa". Con esa frase, Ramón Díaz guiaba a su San Lorenzo a la conquista de la primera Libertadores, que finalmente dejó escapar en cuartos de final y por penales ante la Liga de Quito. Ramón Díaz y no está y su sucesor, Miguel Russo, habló de otra cosa.

"No hay fórmulas para ganar la Copa". El flamante entrenador azulgrana, que al igual que Ramón, ganó una vez con Boca, en 2007, prefiere la cautela. "Para obtenerla se deben presentar múltiples factores que deben coincidir. Hasta los detalles más chicos. Boca tuvo que salir de su cancha porque un tipo le tiró hielo a un línea y ya no es lo mismo jugar en otro estadio", explicó.

"Yo la disputé cuatro veces y en las tres oportunidades anteriores a la que gané en 2007 considero que había hecho las cosas bien", avisó. "En 1996 me tocó un arbitraje de un ecuatoriano muy recordado en la cancha de River y quedamos afuera con la Universidad de Chile". "Con Rosario Central fue por un tiro penal que se erró definiendo en el Morumbí", agregó. "Y con Vélez tenía un equipo para ser campeón y nos postergaron un partido para después del Mundial de Alemania. En ese interín me vendieron varios jugadores y ya no fue lo mismo", recordó.

Refuerzos y Tinelli

Russo dijo que aceptó el ofrecimiento de San Lorenzo "porque es nos planteamos objetivos altos y entrenar un equipo competitivo para pelear todo lo que juegue".

"No quiero meterme en el tema de los jugadores (ver aparte). Yo le dije a los directivos que es lo que necesito y a partir de ese momento es tarea de ellos. Yo no negocio con los futbolistas ni estoy pendiente de todas las cosas que se están diciendo", aseguró.

Sobre la relación con Marcelo Tinelli, principal benefactor del club de Boedo, que pasó de romance a divorcio intempestivo con su antecesor, Ramón Díaz, recargada por las versiones que señalaban que el conductor de "Show match" iba "a dar su respaldo económico si el nuevo técnico es Américo Gallego y no Russo", el entrenador también fue claro. "Ya me reuní con Tinelli. A Marcelo lo conozco desde su época de periodista y siempre tuve buena relación. Es uno de los primeros que quiere que a San Lorenzo le vaya bien. Así que en ésta caminaremos juntos", anticipó.