LA PAZ (AFP/DPA) - Cinco prefectos de oposición pidieron ayer en la ciudad de Tarija rechazar el referendo revocatorio de mandatos de autoridades, convocado para el próximo 10 de agosto en Bolivia y reclamaron al presidente Evo Morales que convoque a nuevas elecciones generales.

El pedido fue formulado por los prefectos de Santa Cruz, Rubén Costas; de Tarija, Mario Cossío; de Pando, Leopoldo Fernández; de Beni, Ernesto Suárez; y Manfred Reyes Villa de Cochabamba, reunidos en lo que denominan el Consejo Nacional Democrático (Conalde).

"Rechazar completamente el referéndum revocatorio que ha quedado anacrónico ante la realidad actual", resumió la posición resuelta el prefecto de Cochabamba, Manfred Reyes Villa. También precisó que respaldarán a los otros departamentos que busquen un modelo autonómico. Su colega de Tarija, Mario Cossío, dijo que "lo urgente es la necesidad de comenzar un proceso de reencuentro y reconciliación nacional".

Los prefectos se reunieron para evaluar los resultados de los referendos en las cuatro primeras regiones que respaldaron los estatutos de gobiernos autónomos, resistidos por el presidente indígena Evo Morales. Los estatutos autonómicos ya lograron respaldo de 85,6 por ciento en Santa Cruz, 81,98 por ciento en Pando, 79,57 por ciento en Beni. Tarija logró este domingo de 78,9 a 80,3% de apoyo, según resultados no oficiales.

"También hoy se decidió apoyar el hecho democrático que se va a dar en Chuquisaca este fin de semana", agregó Reyes Villa. En efecto, los habitantes de Chuquisaca elegirán al reemplazante de David Sánchez, prefecto que renunció a su mandato de cinco años en diciembre del año pasado tras la muerte de tres personas en Sucre, por un conflicto por la aprobación de la nueva constitución.

El gobierno convocó por ley a referendo revocatorio de mandatos del presidente, vicepresidente y de los nueve prefectos (seis de ellos opositores), con la idea de descomprimir la crisis política en Bolivia.

Bolivia se encuentra dividida entre el gobierno, que pretende imponer una Constitución de contenido indigenista, considerada ilegal por la oposición debido a que no fue aprobada por dos tercios de los votos como manda la Constitución vigente y la convocatoria a la Constituyente, y cuatro departamentos bolivianos que pretenden la autonomía aprobada en referéndum nacional en el 2006.