BUENOS AIRES (ABA).- En un clima de suma tensión, el oficialismo en el Congreso se mostraba ayer confiado en conseguir mayoría propia como para no modificar la resolución 125 sobre retenciones.

"Solo cinco diputados (3 de Entre Ríos y 2 de Córdoba) me manifestaron a mi su disenso", se ufanó el jefe de la bancada kirchnerista en Diputados, Agustín Rossi.

Sin embargo, se lo vio muy activo al legislador cordobés delasotista, Arturo Heredia, merodear en un ida y vuelta entre el despacho de Rossi y Felipe Solá para encontrar algún punto de consenso entre los diputados alineados con el gobierno y los justicialistas díscolos.

El oficialismo cuenta con 129 de los 257 diputados nacionales. Le alcanzaría para conseguir la sanción del proyecto oficial con solo levantar la mano, pero varios de aquellos diputados deslizaron que no respaldarán la iniciativa cuestionada. Además del mencionado Heredia, también de Córdoba así lo hicieron Beatriz Halak y Jorge Montoya. Por Santa Fe son disidentes Jorge Obeid y Della Fontana, más tres entrerrianos a los que anoche trataba de convencer el gobernador Urribarri.

Por si ello fuera poco, el jefe de la bancada de la Concertación Daniel Katz, señaló que si bien el acuerdo podía alcanzar a un sistema móvil de retenciones, el consenso no llega a como las plantea el poder ejecutivo. Salvo dos de los integrantes del bloque de la Concertación plural no estarían dispuestos a acatar la bajada de línea de la Casa Rosada (son una decena más trece provinciales integrados).

Pero como el kirchnerismo cuenta con partidos aliados, echando mano a ellos podía alcanzar la mayoría simple necesaria. Según una alta fuente del oficialismo el gobierno descarta que pueda correr peligro el quórum pero quiere mostrar ante la sociedad que está abierto al debate. "El único que fue sincero fue Alberto Fernández, los demás son mentirosos", confió esa fuente.

Al realizar un conteo de porotos, añadió que "los votos más difíciles son Córdoba y Santa Fe. San Luis está perdido y Chubut y La Pampa están adentro" desmenuzó el contador de porotos kirchneristas quien sin embargo reconoció que la cosa va a ser más dura en el Senado donde hay figuras de peso del otro lado como Carlos Reutemann, Juan Carlos Romero, Chiche Duhalde y hasta Carlos Menem.