NEUQUÉN (AN).- La lluvia impidió ayer continuar con el rastrillaje de Martín Osés (23), pero se trabajó arduamente en el análisis de las declaraciones testimoniales que brindaron entre 30 y 40 empleados del boliche Bloke, último lugar al que asistió el joven antes de desaparecer.

En el marco de la investigación -que incluye a la Policía de Neuquén- se supo que mediante un oficio se realizó un allanamiento en el dormitorio de Martín, en la vivienda de su abuela, en busca de indicios que ayuden a esclarecer el caso.

Entre los elementos secuestrados, los pesquisas se llevaron recibos de sueldo, radiografías, papeles con teléfonos y varias cartas de una joven con quien Martín habría mantenido una relación y que desde hace más de un año y medio está residiendo en Mendoza.

Fuentes judiciales confiaron que se busca establecer el domicilio de esta joven en Mendoza para chequear si Martín no ha viajado a la vecina provincia. De ser necesario la fiscalía podría formalizar un requerimiento a la policía mendocina pero para ello deberá darse con el paradero de esta mujer.

La línea de investigación Mendoza surgió a partir del llamado que realizó una mujer de la empresa de transporte Vía Bariloche, quien creyó ver a Osés el martes siguiente a su desaparición en la oficina de calle Pampa y Plana. Si bien la empresa no viaja a la vecina provincia, los pesquisas chequearon si Martín no había comprado pasajes o enviado encomienda a algún punto del país. Nada se pudo obtener respecto de esta línea de investigación.

La familia del joven -que busca por su cuenta en la zona ribereña- denunció que en otras oportunidades Martín fue apremiado por la policía pues contaba con antecedentes y estuvo con pedido de captura.