VIEDMA (AV)- El secretario general de la Gobernación, Francisco González, recibió ayer las quejas por irregularidades en el otorgamiento de viviendas Fonavi en Bariloche que le transmitió un grupo de representantes de las 120 familias que ocuparon unidades habitacionales en esa ciudad.
Asistieron a la reunión en la Casa de Gobierno, Sergio Delfino, Marcelo Miranda, Yoana Barrera, Gabriel Bahamonde y Sonia Giménez. El funcionario provincial estuvo solo, es decir sin la presencia del titular del Instituto de Promoción y Planificación de la Vivienda (IPPV), Vicente Pili, que es el responsable de la entrega de este tipo de complejo.
"Nunca nos enviaron una asistente social, no hubo declaraciones juradas para el otorgamiento de viviendas, y eso se lo trasladamos a González", declaró Delfino a "Río Negro".
Indicó que el funcionario provincial se comprometió a informarle de la situación al gobernador Miguel Saiz y buscar soluciones, ratificando que "vamos a resistir si nos quieren desocupar porque el IPPV no hace las cosas bien".
El grupo viajó por sus propios medios a esta capital para tratar de llevar una palabra de aliento a sus familias, pero por los resultados de las conversaciones, volvieron a su ciudad sin el suficiente ánimo. Delfino indicó que se le informaron "con nombre y apellido las irregularidades que detectamos en la delegación Bariloche con la entrega de viviendas y pretendemos que se investigue". Sin embargo, rehusó brindar más detalles respecto de los responsables argumentando que "están en una causa judicial".
La problemática
Durante la conversación con González se analizó la situación particular del mencionado complejo habitacional ocupado antes de la inauguración como también los problemas que tienen unas 8.000 familias de esa ciudad para conseguir que se les adjudique una vivienda.
En el transcurso del diálogo, el secretario general de la Gobernación les informó que próximamente el IPPV haría un anuncio de la construcción de un millar de unidades habitacionales aunque el cupo sería a compartir con otras ciudades de la provincia.
Lo concreto es que los enviados a Viedma vuelven sin nada concreto para anunciar al resto de los integrantes de la ocupación.