Miércoles 18 de Junio de 2008 Edicion impresa pag. 31 > Sociedad
Verdadera odisea para trasladar a un herido
La soledad de la gente de campo junto a la falta de medios y deficiente infraestructura transformaron en incierto y riesgoso el traslado de un hombre que se quebró la pierna, a 100 km de Jacobacci, cerca del Paralelo 42.

INGENIERO JACOBACCI (AJ).- Un hombre que se fracturó una pierna mientras recorría un campo a caballo y dos compañeros que lo asistieron vivieron una verdadera odisea para trasladarlo hasta el hospital de esta ciudad.

El hecho desnudó las necesidades que tienen muchas personas que viven en zonas inhóspitas de la provincia y que en situaciones extremas o urgentes, carecen de puestos sanitarios o policiales, caminos en condiciones transitables y medios de comunicación que los acerquen a los centros poblados.

El accidente ocurrió el pasado miércoles alrededor de las 17 en el establecimiento ganadero "La Gotera", unos 100 kilómetros al sur de Jacobacci por la Ruta Provincial 76, cerca del Paralelo 42. El lugar se encuentra a más de 1.400 metros sobre el nivel del mar, en una zona donde este año ya se han registrado algunas nevadas y fuertes heladas que mantienen la temperatura bajo cero durante todo el día. La mayoría de los habitantes de esa zona, son hombres de avanzada edad que viven solos o con algún compañero de trabajo.

A esa hora Luis Martínez, en su caballo, iba a encerrar animales en un cuadro cercano a la casa. Luego de recorrer 200 metros, el caballo se asustó y resbaló cayendo con todo su peso sobre la pierna derecha del jinete. Sin poder ponerse de pie, Martínez comenzó a gritar por ayuda a uno de sus compañeros que estaba en el corral vacunado ovejas. "Él le gritaba y mi hermano Kiko pensaba que le estaba haciendo una broma. Todavía le dijo levantate, uno no te puede dejar solo que te andás cayendo" relató Nicanor Aranda, encargado de la casa del campo.

En el momento del accidente Aranda recorría el campo a caballo y llegó media hora más tarde. Para entonces, su hermano Kiko había cargado a Martínez en una carretilla y lo había llevado a la puerta de la casa. Juntos, lo entraron y acostaron en un colchón, le inmovilizaron la pierna fracturada y salieron a caballo a buscar ayuda. Fueron hasta un puesto a unos 8 kilómetros donde había una camioneta. Al volver tuvieron que quebrar la gruesa capa de hielo que cubre el arroyo El Caliente para que el vehículo pudiera cruzar un curso de agua de más de cinco metros de ancho.

Si bien tenían unos pocos litros de nafta para poner en marcha un generador eléctrico y así encender un equipo de radio, ante el temor de no poder establecer comunicación con ningún receptor, prefirieron priorizar el combustible para el vehículo.

Llegaron a La Gotera alrededor de las 20 y cuarenta minutos más tarde salieron con destino a Jacobacci. "Subimos a Luis a la caja de la camioneta, lo pusimos sobre un colchón y lo tapamos bien porque hacía mucho frío. En el viaje veníamos parando para ver cómo iba porque la ruta está muy fea y la camioneta se movía mucho con el serrucho. Le di un calmante que me había dado el médico para el dolor de muelas y se ve que le hizo bien porque se durmió" agregó Aranda.

A unos 6 kilómetros de Jacobacci la camioneta comenzó a fallar y se detuvo. A Aranda no le quedó más remedio que caminar hasta Jacobacci y llegó a la casa de su hija Norma, que es enfermera del hospital "Rogelio Cortizo". Esta avisó a sus compañeros para que fueran a buscar al accidentado que ingresó al nosocomio pasada la 1 del jueves. Horas más tarde y debido a la gravedad de la fractura, fue derivado a Bariloche para operarlo y colocarle clavos en la pierna.

Use la opción de su browser para imprimir o haga clic aquí