SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- El Ejecutivo municipal puso en marcha un estricto plan de austeridad con el propósito de equilibrar las cuentas públicas y reducir el pasivo corriente, que ronda los 9 millones de pesos.

El intendente Marcelo Cascón admitió que la situación es "muy difícil" pero confía en mejorar la recaudación y en obtener rápido resultados con el recorte de gastos, que alcanza a un amplio número de partidas.

En relación con los sueldos, aseguró que no habrá impedimentos para pagar junio en término, "pero el aguinaldo deberá esperar algunos días".

Luego de un análisis más exhaustivo de la situación heredada, Cascón observó que la gestión de su predecesor Darío Barriga, exprimió los recursos sin racionalidad y "dejó cientos de facturas sin pagar".

El secretario de Economía, Obras y Servicios Públicos, Jorge Temporetti, explicó con la ejecución presupuestaria en la mano que el déficit del período enero/abril fue de 1.578.443 pesos. Los números de mayo todavía no están cerrados, pero seguramente ese cuadro se agravó debido a una acentuada caída en la recaudación.

Temporetti exhibió también un informe firmado por el director de Contaduría, Hugo Mastrolía, que ubica la deuda exigible en los 5,4 millones de pesos, que incluyen 532.000 por órdenes impagas de 2007 y 1,.48 millones de deuda bancaria, que el municipio tomó como último recurso para pagar los sueldos de mayo. A esos incumplimientos se suman otros 3.627.217 de deuda corriente no exigible.

Según el funcionario, la perspectiva que enfrentan es la de un ingreso mensual de 5 millones de pesos, de los cuales 4 millones son absorbidos por salarios.

El plan impone entonces un drástico recorte sobre los subsidios, la publicidad institucional, el alquiler de equipamiento y las horas extra del personal, salvo los que trabajan en fiscalización y tránsito.

Temporetti indicó que la meta es "llegar al equilibrio antes de fin de año". También anticipó que elaborarán un nuevo presupuesto anual "más ajustado a la realidad" que proyectan enviar al Concejo en agosto próximo.

El listado de la deuda impaga incluye 515 empresas, proveedores y organismos. Figuran allí por ejemplo la constructora Codistel SA con 97.097 pesos, el correo Andreani con 13.575, Telefónica con 140.824, el corralón Palm con 37.057, Informática Global SA con 16.767 y NCC construcciones con 113.004 pesos.

También aparecen el SOYEM y UPCN, a los que el municipio les debe en conjunto $ 223.613 por retenciones no depositadas. Otros acreedores son la maderera Madeco SA con $ 79.725, Vivero La Araucaria con 4.458, Patagonia de Lubricantes SRL con 41.607 pesos, Policía de Río Negro con 56.360 y Vía Bariloche SA con 13.588.