MADRID (DPA/AFP) - España fue ayer escenario de una de las mayores operaciones en el país contra la mafia rusa: las fuerzas de seguridad detuvieron al menos a 20 personas en varias partes del país, en el marco de un operativo ordenado por el juez Baltasar Garzón con más de 400 agentes desplegados.

La justicia afirmó que la organización Tambovskaya-Malyshevskaya, "la estructura criminal de origen ruso más importante en el mundo" y la cuarta en importancia a nivel mundial fue "totalmente desmantelada" en este operativo Madrid, Barcelona, Málaga, Alicante y las Islas Baleares se encuentran entre los lugares en los que se ha desarrollado un operativo en el que colaboraron los servicios de inteligencia de Estados Unidos, Alemania y Suiza, entre otros.

Entre los arrestados se encuentra Gennadios Petrov, presunto jefe y fundador de la red y los "jefes principales" de la organización. Residían en España "desde donde dirigían sus actividades criminales en Rusia, en varios países de la Unión Europea y en los Estados Unidos", añadió.

Garzón acusa a los detenidos de asociación ilícita y blanqueo de capitales. Al parecer, se dedicaban desde hace más de una década al tráfico de personas de cobalto y tabaco, drogas y armas y al blanqueo de dinero, además de haber llevado a cabo sobornos y asesinatos. Según informó el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, la suma de las cuentas bancarias bloqueadas en la operación asciende a 12 millones de euros.

La policía se aincautó además de 200.000 euros en metálico, 23 automóviles de lujo, obras de arte y un yate en una treintena de registros en empresas, despachos de abogados y residencias de lujo. El de ayer es el segundo gran golpe contra la mafia rusa en España, tras el que tuvo lugar en el 2005 y en el que los detenidos fueron una treintena.