PLAZA HUINCUL (ACC) - Finalmente, se rubricó el convenio entre el Consejo Provincial de Educación y la empresa Repsol YPF para hacer uso de un edificio, donde funcionará la mitad de los grados de la Escuela primaria N° 133. El resto permanecerá en las actuales instalaciones, mientras se realicen los trabajos de refacción de un ala del edificio. Esta escuela, que está situada en el barrio Uno, empezó las clases pero con "rotación de grados". Recién ahora, los alumnos acudirán a clases todos los días.

El anuncio de la firma del convenio lo formuló la responsable del distrito Educativo II, Claudia Vistoso, quien especificó que el CPE recibió en comodato por dos años un edificio. "Se hicieron las gestiones en cuanto a seguros y demás y ya estamos en condiciones de iniciar el traslado. No toda la escuela porque la comunidad educativa había resuelto que sean únicamente tres grados de la mañana y tres de la tarde. El resto sigue en el edificio porque de hecho han estado trabajando con la rotación de cursos", especificó Vistoso. Y agregó que "de esta manera, todos los días todos tendrán clases".

El acuerdo alcanzado permite al CPE hacer uso durante dos años del edificio donde funcionó el sector de Geología de la petrolera cuando era estatal. Las instalaciones no están ociosas, sino que son ocupadas por la Tecnicatura en Petróleo y Gas -que también depende del CPE- por lo que serán compartidas. Aquí, también funcionó un área del ente Enim.

La funcionaria del distrito educativo II, indicó que ni bien existió la posibilidad de hacer uso de ese edificio se comenzaron las gestiones para permitir que parte del alumnado se trasladara allí. "Las empezamos con la Tecnicatura y con el Enim pero el CPE tiene que hacer todo tipo de convenio con el dueño de las instalaciones que sigue siendo YPF, porque la empresa desconoce haber cedido al municipio de Huincul esta edificación como se pensaba en un primer momento", acotó Vistoso.

Fue este trámite precisamente el que demoró bastante tiempo y por eso es que recién desde ayer, se concretó la mudanza y los chicos asistieron a clases.

El problema en la Escuela N° 133 se detectó a principio de año, en un ala. La importante rajadura de las paredes obligaron a clausurar ese sector por precaución. Luego, los informes técnicos no aseguraban que pudiera ser usado sin riesgos. Es por esta razón que se decidió utilizar la otra área del edificio y como las aulas eran menos, se resolvió la rotación de cursos. Esto es, que determinados días iban ciertos grados y el resto de la semana otros. Siempre se priorizó que los pequeños del primer ciclo tuvieran la mayor continuidad posible en las clases. Hasta tanto se concluyan con las refacciones, la escuela funcionará desdoblada en los dos edificios que están relativamente cerca porque ambos se sitúan en el barrio Uno.