NEUQUÉN (AN) - Los equipos de investigación de la Policía de Neuquén buscan desde el domingo a un joven que, tras ser visto en un boliche al que había ido con un primo y un amigo, no regresó a su hogar y hasta anoche estaba desaparecido. Los investigadores no arriesgaron ninguna hipótesis, pero alentaron las posibilidades de dar con él en las próximas horas a raíz de una versión que indica que fue visto en la mañana de ayer, en un quiosco del barrio Villa María, comprando cigarrillos.

Se trata de Martín Gustavo Osés, de 23 años, quien vive con su abuela, ya que sus padres están separados.

Los jefes de la comisaría Segunda que, conjuntamente con personal del Departamento de Seguridad, interviene en el caso, informaron que Osés concurrió la noche del viernes, con un primo y un amigo al boliche Bloke, ubicado en la avenida Olascoaga, cerca del río Limay.

La última vez que lo vieron sus acompañantes -habría sido su familiar- fue alrededor de las 5 de la mañana del sábado y desde entonces no se conoce ninguna referencia cierta, excepto la versión de que fue visto ayer. Aunque después de varias horas no se avanzó con datos para seguirle los pasos.

Los equipos de filmación del local bailable no aportaron ningún dato debido a que, según informaron fuentes policiales, precisamente ese día habían sido reprogramados y no registraron ningún movimiento.

Entre las diligencias que se efectuaron ayer se incluyó un allanamiento en un domicilio, para verificar el automóvil en el que el grupo había ido al boliche. Se trataría de un Fiat Uno, pero no se supo si la tarea había permitido obtener algún dato para orientar la investigación.

"No se sabe cuándo, cómo y si fue en compañía de alguien cuando abandonó el local", señalaron fuentes del caso.

El muchacho vive desde hace algún tiempo en la casa de su abuela, quien hizo la denuncia por la ausencia del joven el domingo al mediodía. Si bien no acostumbraba a ausentarse tanto tiempo de la casa, se especulaba que podría regresar ante la eventualidad de que se hubiera quedado en la vivienda del algún conocido.

Según se supo, el padre residiría en una localidad del interior provincial y la madre en un barrio del norte de la ciudad. Una de las especulaciones era que el muchacho podría haber ido a visitar a su padre.

Los responsables del boliche informaron que no se registró ningún incidente a lo largo de la jornada y el personal de seguridad no registró ningún episodio que pudiera aportar a la investigación.

Al momento de concurrir al boliche Osés usaba zapatillas, vestía un pulóver rojo y un pantalón de jean azul.

Para la continuidad de la investigación los pesquisas tenían previsto entrevistar a familiares y amigos del joven. Según se supo, en la actualidad Osés no desarrollaba ninguna actividad en particular, ni laboral ni estudiantil.