NEUQUÉN (AN) - A dos años de iniciada la etapa de normalización, con la elección de delegados del claustro estudiantil puede volver a funcionar uno de los máximos órganos de conducción de la Universidad Nacional del Comahue: el Consejo Superior. "Fue muy difícil, pero se logró el objetivo de haber cumplido la misión que era contar con los órganos de gobierno de la universidad", dijo la rectora interina Teresa Vega, que condujo el proceso.

A su juicio, al margen de las dificultades, no fue un proceso "en vano, hay espacios ganados de madurez en la cuestión del manejo universitario. Hay que cambiar algunas formas de hacer política en la universidad. No podemos seguir tratando de imponer por el número de votos determinada situación. Tienen que existir los espacios adecuados para analizar, estudiar y debatir los temas y luego ser sometidos a los órganos de votación".

Agregó que esa línea de trabajo debe ser de alguna manera la que marque el rumbo ahora "porque no podemos volver a hipotecar la vida diaria de la universidad, porque no nos pertenece".

Manifestó que se deben seguir construyendo consensos para no llegar a la confrontación, como ocurrió. "Hay formas de convivencia en la universidad que tenemos que mejorar", opinó.

Vega dijo sentirse "aliviada" tras el paso dado. Destacó que la conformación del Consejo Superior implica también tener al mismo tiempo "la Asamblea Universitaria, que es la máxima autoridad con posibilidades de cambiar el estatuto, crear facultades y tomar las mayores decisiones".

Señaló que el proceso fue difícil porque había un fuerte enfrentamientos entre los sectores de la universidad. "Esto apareció expresado, de alguna manera, en algunos grupos contenidos en la Federación Universitaria del Comahue" (FUC), dijo.

Remarcó que hace dos años "hablar de conformar el Consejo Superior, para ellos era inadmisible". Opinó que fue porque existía el fuerte temor de que conformado el Consejo se elegía al rector y no se iban a atender los reclamos estudiantiles.

"Se ha recobrado la confianza en el diálogo, en las diferencias. Tal es así que hasta el jueves los estudiantes no garantizaban sentarse a la asamblea si los decanos no llevábamos el compromiso, aún cuando se había dado reiteradas veces", comentó. Indicó que ahora, "lograda esa confianza significa que podemos volver a sentarnos juntos a sesionar y eso es muy importante".