Los productores y transportistas de dos lugares emblemáticos, Ramallo y Gualeguaychú, no están dispuestos a acatar la decisión de las entidades rurales que habían acordado el levantamiento del paro para mañana.

Los transportistas autoconvocados y chacareros de Ramallo (Buenos Aires) decidieron ayer en asamblea volver a la ruta el próximo lunes. Por su parte en Gualeguaychú se define hoy en asamblea de productores la posición a tomar, si bien ya dejaron trascender que no hay posibilidades de levantar el corte si no existen señales concretas del gobierno para conversar sobre las retenciones.

El jefe del bloque de Diputados kirchneristas, Agustín Rossi, estimó que "al inicio de la semana que viene habrá una convocatoria (del gobierno) en la que se establecerá la mesa del diálogo y se avanzará sobre temas que aún están pendientes".

Sin embargo, fuentes de la Casa Rosada adelantaron a DyN que las retenciones son un tema archivado y que no formará parte de la próxima discusión, además de condicionar la convocatoria al diálogo a que se restablezca totalmente la normalidad en las rutas cortadas por los productores.

Todo indica que la apertura de esta nueva instancia dialoguista no garantiza el fin del conflicto que lleva casi tres meses en las rutas del país.

De hecho, el ex jefe de Estado y actual presidente del PJ, Néstor Kirchner, volvió a arremeter con dureza contra los ruralistas, al reclamarles que sean "solidarios con los que menos tienen" y que "terminen con la hipocresía".

Los productores agropecuarios mostraron posturas distintas en sus expectativas sobre el reinicio de la discusión. Algunos reclamaron que la reunión se haga en el marco de la convocatoria del defensor del Pueblo, Eduardo Mondino, otros dijeron que lo importante es que esté el gobierno.

Asimismo, si bien ciertos ruralistas manifestaron la posibilidad de continuar con protestas a la vera de los caminos, otros sostuvieron que la solución al conflicto está en una mesa de diálogo y no en las rutas.

En tanto, el presidente de la Federación Agraria de Entre Ríos, Alfredo de Angeli, calificó al gobierno como "una tiranía" y consideró "lamentable" la actitud del oficialismo de "desconocer a todos" los sectores que llamaron a un diálogo.

En la misma línea, el presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP), Pedro Apaolaza, aseguró que "se acabó el doble comando" y "quien conduce este país es Néstor Kirchner", al que acusó de encabezar "un golpe de timón" en el gobierno. Por ello, sostuvo que "guardar silencio es la mejor contribución que puede hacer" para el país, tras señalar que "la señora no conduce", en referencia a Cristina Fernández, y manifestó que "todo indica que el conflicto tiene que continuar porque el gobierno está dispuesto a no considerar nada".

Algo más conciliador, el vicepresidente de la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro), Carlos Garetto, afirmó que la solución al conflicto entre el gobierno y el campo "está en una mesa de diálogo, no en una protesta en las rutas". "Siempre propiciamos el diálogo y canalizar por esa vía el conflicto, porque creemos que la solución pasa no por la protesta en las rutas ni por las asambleas, sino por una mesa de negociación, donde se pueda lograr un acuerdo que sea cumplido por las partes en todos sus términos", señaló. Para ello, sostuvo que "las partes tienen que ceder algo y acercar sus posiciones".

"Uno no puede decir 'esto no se toca' y el otro tampoco puede decir 'quiero que se toque todo'. El campo va con ese ánimo de negociar y encontrar una salida", afirmó el vice de Coninagro.

(DyN/Redacción Central)